Luis Tosar el nuevo Hyde

César es un portero que ha construido su vida de rutinas: revisa el correo, da los buenos días a los vecinos y atiende los imprevistos domésticos con diligencia y simpatía. Todos querríamos una persona así en nuestro portal… ¿O no? La cara amable de César esconde una vida infeliz que sólo encuentra alivio en la desgracia ajena. Su infelicidad no le impide, sin embargo, llevar a cabo todo tipo de tropelías para conseguir que su comunidad de vecinos se convierta en un lugar donde reinan el miedo y la tristeza. Su plan da resultado, excepto por una joven difícil de amedrentar que hará que lleve su objetivo hasta lo último.

Un guión que atrapa
«Desde el principio se muestra un microcosmos dañado por la relación terrible que este portero tiene con los vecinos. Pero el objetivo de César, obsesionado por que nadie a su alrededor sea feliz, se encuentra con un obstáculo, una vecina que le pone las cosas muy difíciles. Él acaba olvidando todo y obsesionándose con aquella que no puede corromper, que es el personaje de Marta Etura», explica Jaume Balagueró.

El director, uno de los responsables de la buena salud del cine de terror español gracias, entre otras, a «[Rec]», recibió de un amigo, Alberto Marini, el guión: «Me lo envió para que opinara sobre él. Me atrapó, me pareció una historia de suspense distinta y le dije que si lo me propusieran para dirigirlo, no dudaría en hacerlo». Así, el proyecto ya tenía medio camino andado, pero faltaba ese actor que pudiera encarnar al portero tanto en su faceta del doctor Jekyll como en la del señor Hyde: «El personaje parece hecho para Luis Tosar. Su potencia interpretativa, credibilidad, precisión... Era un papel muy especial porque tenía que resultar repulsivo y al mismo tiempo atractivo. El reto era que el espectador se sintiese involuntariamente identificado con él y, por lo tanto, apoyando al mal», asegura Balagueró. El otro gran aspecto era la fotografía: «Necesitábamos una puesta en escena muy precisa porque el suspense fluctuaba: a veces estaba dirigido hacia la víctima, otras hacia el verdugo. El trabajo de Rosso es sorprendente», concluye Balagueró.
 

El director
Terror y más
Aunque sus éxitos responden al género, no sería extraño ver a Balagueró (en al imagen) al frente de otras historias: «Si un día veo que un melodrama me cautiva, querré contarlo», dice.