La «huelga» llega al juzgado

Madrid- Si los clubes de Primera División no se ponen de acuerdo a la hora de tomar medidas es el que el fútbol español está más desunido que nunca. De los veinte de la máxima categoría, siete insistieron el martes, en la reunión de la Liga de Fútbol Profesional, que no comulgaban con la medida del colectivo de suspender o aplazar la jornada del 2 y 3 de abril, la próxima que tiene que disputarse. Y de esos siete, fueron seis los que ayer interpusieron una demanda en la vía civil de los juzgados de Madrid, en la que se impugna la suspensión de la jornada trigésima de la Liga de Primera División acordada por la Liga de Fútbol Profesional, el pasado 11 de febrero.
Prueba evidente de que el colectivo no está unido, ya que lo acordado el pasado 11 de febrero tendrá que ser revocado por una Asamblea de la Liga. Es la única fórmula legal que permitiría que halla fútbol el primer fin de semana de abril. Y esa parece ser la solución , la Asamblea se convocaría para la próxima semana.
Sin embargo, los disidentes, encabezados por el Villarreal y el Sevilla, que cuentan con el apoyo del Athletic Club, la Real Sociedad, el Espanyol y el Zaragoza, han interpuesto la demanda civil en la que solicitan la adopción de determinadas medidas cautelares tendentes a la disputa de dicha jornada en la fecha prevista o, al menos, de los partidos de los seis clubes demandantes, según informan Sevilla y Villarreal en sus respectivas páginas web. Los clubes han pedido a la LFP, Federación, y Mediapro que designen horarios y árbitros, cosa que de momento no se conoce.
Jornada 30: Real Madrid-Sporting; Villarreal-Barça; Osasuna-Atlético; Sevilla-Zaragoza; Getafe-Valencia; Almería-Athletic; Real-Hércules; Deportivo-Mallorca; Levante-Málaga y Espanyol-Racing.