CaixaBank cierra la puerta a nuevas fusiones

MADRID- El consejero delegado de CaixaBank, Juan María Nin, dio ayer por finalizada la participación de la entidad en el proceso de reordenación del sector financiero español. En una conferencia con analistas, Nin descartó la posibilidad de acometer nuevas integraciones tras la fusión por absorción de Banca Cívica, aprobada el lunes por los consejos de administración de las dos entidades bancarias y las cinco cajas de ahorros accionistas de éstas. «No tenemos ninguna otra operación sobre la mesa», aseguró Nin.

Crecimiento orgánico
En las últimas semanas, se había especulado con la posibilidad de que CaixaBank hubiera puesto su punto de mira en la subasta de Novacaixagalicia, una entidad cuyo proncipal accionista es el FROB, que controla el 93% del capital, y que será subastada, si nadie lo remedia antes, a partir del mes de octubre. CaixaBank dejó ayer claro que la intención de la entidad es seguir creciendo de forma orgánica en aquellas regiones donde está por debajo del objetivo marcado de controlar el 15% del mercado.

El banco resultante de la fusión es líder indiscutible en Cataluña, Andalucía, Navarra, Baleares y Canarias, y la segunda marca en importancia en otras cinco (Madrid, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y País Vasco.

A menos que modifique su estrategia, CaixaBank confiará su crecimiento futuro a la mejora de la actividad económica. En la actualidad, una de cada cinco nóminas y una de cada cinco pensiones están domiciliadas en CaixaBank o Banca Cívica. La entidad fusionada maneja el 14% de los depósitos totales de la banca y concede el 13,4% de los créditos.

Regreso al parqué
CaixaBank se reservó el derecho de poder entablar negociaciones para alcanzar acuerdos para la adquisición o integración de otros grupos o entidades financieras, algo que no podrá hacer Banca Cívica.

Durante la reunión con los analistas, Juan María Nin no quiso detallar el impacto que tendrá la integración en el cierre de oficinas ni en el ajuste de plantilla, aunque sí que producirá sinergias en el primer año de 54 millones de euros, de 270 millones el próximo año y de 540 en 2014.

En su vuelta al parqué tras darse a conocer los términos de la fusión, las acciones de Banca Cívica cayeron un 16,44%, desde los 2,22 euros del viernes hasta 1,855, por debajo incluso del precio ofrecido por CaixaBank para el canje de acciones. A lo largo de la sesión cambiaron de manos más de 2,17 millones de títulos. En una sesión teñida del rojo de las pérdidas (el Ibex se dejó un 1,03%), los títulos de CaixaBank perdieron un 2,43%.