San Sebastián

Universos paralelos y encontrados

A la izda., Imanol Arias y la ministra Garmendia con sus parejas. Alaska, Mario Vaquerizo y Carmen Lomana (dcha.)
A la izda., Imanol Arias y la ministra Garmendia con sus parejas. Alaska, Mario Vaquerizo y Carmen Lomana (dcha.)larazon

Tras un primer día aletargado de vips, ayer no había «flashes» para todo el famoseo que, literalmente, no cabía en el «front row» de Roberto Torretta. Encabezaba la delegación Cristina Garmendia, que confesó ser clienta mucho antes que ministra, aunque deslumbró más con el vestidazo fucsia que lució después para Modesto Lomba. «Tenemos una industria de la moda y unos grandes talentos que hay que potenciar, cada cual desde su Ministerio, especialmente en momentos de crisis como éste», reconoció a LA RAZÓN flanqueada por su marido, tras departir –con una ministra no se habla, se departe– con Imanol Arias y su novia. Mar Flores por primera vez se trajo a Cibeles a Javier Merino, que se sentó a sus anchas y sin apenas dejar ángulo de visión a Nieves Álvarez y su impresionante bolso de calaveras de McQueen. Tampoco tenían mucho margen de movimiento el clan Raphael-Bono: Natalia Figueroa, Ana Rodríguez (en la imagen de la izquierda) y Alejandra Martos . Con Hannibal Laguna llegaron Chenoa, Tamara, Juncal Rivero y Lola Marcelli. En las antípodas de este perfil de vips, el plantel que ovacionó a Davidelfin. Los cabeza de cartel: Boris Izguirre, Antonia Sanjuan y Mario Vaquerizo con su «Olvi». Por cierto, al lado les sentaron a un zombie –literal–, quizá por aquella canción de Alaska… Cerraba la «clack» Bimba sin Lola, pero con su bebé. Entre el inframundo y la «high class», un enlace: el Lomanismo, que lo mismo saluda a Garmendia con un «Mira qué vecina de San Sebastián tengo» que escucha los susurros de Vaquerizo. La joya de la corona.