Ciencia y Tecnología

Futuro de la tierra

Se agravan, de día en día, los males de la tierra. El retroceso medioambiental salta a la vista. El agua, por poner sólo un ejemplo, es un recurso vital que se agota ante nuestra más grande indiferencia.

La Razón
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Parecería que estas cosas no fueran con nosotros. Si los gobiernos del mundo medio aplicaran los acuerdos a los que ellos mismos han llegado en cumbres y convenciones de todo tipo, estaríamos en el buen camino. Pero no. Aquí, a la hora de la verdad, nadie cumple por más que el planeta esté en riesgo. ¿Qué es lo que falla? Tal vez nos sigue faltando una verdadera plataforma única -que los grandes no quieren-, capaz de construir una sociedad global justa, con un nuevo sentido de interdependencia y responsabilidad compartida, para el bienestar de toda la familia humana. La sostenibilidad ecológica es imposible sin esto. Necesitamos un gran acuerdo que afronte la protección ecológica y la erradicación de la pobreza como lo que es: algo interdependiente e indivisible. La justicia social y la economía van unidas. Por eso, el bienestar de todos es no sólo un imperativo ético y social, sino también ambiental. Sin acceso universal a la educación, a la salud y al trabajo como oportunidad para abrirse paso y asegurarse un porvenir, no habrá en la tierra un modo de vida sostenible para las generaciones presentes y futuras. Ni habrá un entorno digno. No hay otro bienestar, otro modo de vida humano.