El Estado reduce su déficit y la Seguridad Social su superávit

Este déficit fue consecuencia de unos ingresos no financieros que cayeron un 13%, hasta los 49.406 millones de euros, y de unos pagos que disminuyeron un 15% (73.538 millones).
A pesar de esta mejoría en el déficit público, está muy lejos de la caída que registró a principios de año, de hasta el 50%, y se ha situado por debajo de la de mayo, que fue del 24,7%. A pesar de todo, el secretario de Estado de Hacienda, Juan Manuel López Carbajo, indicó ayer que el dato de los primeros seis meses muestra una tendencia que refleja la estabilización de la economía y confirma que la senda de consolidación fiscal se está cumpliendo, informa Efe.

Carbajo insistió en que la previsión del Gobierno de cerrar el año con un déficit del 6% del PIB para el conjunto de las administraciones públicas está «encauzada correctamente», y subrayó, sobre la participación de las comunidades autónomas en este objetivo, que «la senda es correcta» y que sus planes de saneamiento recogen un compromiso en este sentido.

Los ingresos por impuestos crecieron un 4,2%, hasta los 82.595 millones de euros, desacelerándose su crecimiento respecto a mayo, debido al aumento de las devoluciones por IVA mensual en el mes de junio, asociado al fuerte crecimiento de las exportaciones (que no pagan este impuesto), según explicaciones del Ministerio de Economía. La recaudación por IVA se modera así al 9,4%, y eso que la subida de tipos de este impuesto entró en vigor en julio del año pasado, por lo que no se esperaba este frenazo hasta el próximo balance de la ejecución presupuestaria. La caída del consumo es la responsable de esta ralentización ya que la recaudación de este impuesto en las operaciones interiores sólo creció un 6,3%.

Sociedades sigue mal
Por el Impuesto de Sociedades se ingresaron 4.006 millones de euros, el 15,6% menos que en 2010, como consecuencia de la caída de ingresos por el primer pago fraccionado abonado en abril. Los ingresos por IRPF (32.297 millones de euros) aceleran su tasa de crecimiento respecto a mayo en más de dos puntos porcentuales, hasta el 6,5%, por las menores devoluciones y la eliminación de la ayuda por hijo. La recaudación por impuestos especiales cayó un 4%, atribuible, al descenso del Impuesto sobre Labores del Tabaco (3,6%) y sobre Hidrocaburos (5,1%).
Por otro lado, los pagos no financieros cayeron un 19,7%, por la disminución de las transferencias corrientes a las comunidades fruto del nuevo sistema de financiación. Dentro de este capítulo, los gastos de personal crecieron un 0,5%, debido a la evolución de las pensiones de clases pasivas y el efecto de la compensación por la desviación del IPC en 2010. Los sueldos y salarios del personal activo cayeron un 5,2%, un año después de la reducción media del 5% en la nómina de los empleados públicos. Sin embargo el recorte del déficit del Estado no ha cubierto los excesos de la Seguridad Social. Ésta obtuvo un superávit de 8.321,21 millones de euros hasta junio, un 16,06% menos, consecuencia de unos ingresos que alcanzaron los 60.179,68 millones, un 0,44% menos, y de unos gastos de 51.858,47 millones (2,62% más) por el aumento del pago de las prestaciones por desempleo.