Cataluña

OPINIÓN: Cambio de tercio

La Razón
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Cuando concentras toda tu acción en presionar algo y de golpe te lo retiran, lo más probable es que caigas al suelo. Eso le puede pasar a CiU, si no reacciona a tiempo.
La estrategia de Artur Mas centrada en evitar un nuevo tripartito se ha quedado sin adversario, tras el anuncio del President Montilla de que no reeditará la fórmula. Eso le obliga a él, y al resto de los partidos políticos, a concretar sus propuestas, pues si no lanzará sus dardos contra un peligro inexistente.
Quizás por ello, su primera reacción ha sido intentar ganar tiempo, decir que no se lo creía. Pero los socialistas resultan muy creíbles cuando afirman que su catalanismo no es independentista y que no gobernarán si el precio es convocar un referéndum segregacionista o favorecer aventuras soberanistas.
Montilla se la juega, pero con su movimiento lanza un mensaje claro a los suyos y de paso obliga a Mas a mojarse y definirse, cosa que ha intentado no hacer, hasta ahora. Porque, si no reafirma la estrategia fomentada y alentada con los referendums independentistas, malo y si no lo hace, peor.
Cuanto más tarde en reaccionar al nuevo escenario, más riesgo tiene que los socialistas continúen desplazando el debate electoral hacia su terreno, como ha venido sucediendo desde que entraron en campaña.