Asuntos sociales

Final feliz para los sextillizos prematuros de Texas

Los sextillizos de Texas han mantenido en vilo a la sociedad americana desde que nacieron el pasado mes de abril. Llegaron al mundo antes de tiempo y han tardado más de la cuenta en recibir el alta en su lucha por sobrevivir. Pero, por fin, el último de los seis hermanos está ya en casa.

Final feliz para los sextillizos prematuros de Texas
Final feliz para los sextillizos prematuros de Texaslarazon

Andrew, Benjamin, Levi, Allison, Caroline y Leah están por fin juntos. Son hermanos (tres chicos y tres chicas), sextillizos, prematuros y muy mediáticos, tanto que todos los medios de comunicación de Texas, el estado norteamericano donde viven, les han dado una bienvenida muy especial: por fin están los seis junto en casa.El pequeño milagro ha sido una auténtica carrera de obstáculos para cada uno de ellos y para sus padres, Lauren y David Perkins, que durante meses han temido que alguno de ellos se quedara en el camino. Pero el equipo de 35 médicos del Texas Children's Hospital donde nacieron ha obrado el milagro.Esta semana, la última de los sextillizos, Leah, ha recibido por fin el alta hospitalaria y se encuentra en casa, después de haber sido asistida por el equipo médico durante este casi medio año. En el centro hospitalario le hicieron una fiesta de despedida.El más grande pesaba menos de medio kiloLos pequeños nacieron el pasado 23 de abril, diez semanas antes de lo debido, con sus órganos vitales insuficientemente formados como para sobrevivir. El más grande de ellos pesaba 425 gramos. Ni siquiera medio kilo. El más menudo de ellos, apenas 280 gramos. Un auténtico reto de supervivencia para los médicos.Poco a poco, los pequeños fueron recibiendo el alta y siendo remitidos a su casa, donde sus padres fueron haciéndose a la idea de lo que suponía sacar adelante a tan numerosa familia. Pero faltaba la última de ellas, Leah, que ha necesitado de más cuidados que ninguno. De hecho, tuvo que pasar por tres operaciones intestinales, ya que era incapaz de alimentarse sin la ayuda de una sonda.Lauren y David, los padres, no caben en sí de gozo, y han reconocido a los medios de comunicación estadounidenses que es el día más feliz de sus vidas. Ahora empieza, para ellos, el reto de cuidar de sus hijos cada día. Las fotos de los sextillizos de Texas dan una idea de hasta qué punto su nacimiento y supervivencia ha sido un pequeño milagro.