Nueva York
Un modelo mata y castra a un periodista del corazón portugués
Carlos Carlos, conocido periodista y cronista social portugués, ha sido hallado muerto en una habitación del hotel neoyorkino en el que se hospedaba. El principal sospechoso es Renato Seabra, un joven modelo portugués de 20 años con el que, presuntamente, mantenía una relación sentimental.
Una de los rostros más conocidos de la pequeña pantalla portuguesa ha sido encontrado muerto en un hotel de Nueva York. Según ha informado uno de sus amigos más íntimos, Luís Pires, el periodista decidió pasar la Nochevieja en la ciudad neoyorkina en compañía del joven modelo portugués Renato Seabra.
Sin embargo, lo que parecía ser un viaje tranquilo y relajado ha acabado en una historia con un final digno de culebrón latinoamericano.
La Policía, que fue avisada a las 19h (hora local), encontró al fallecido en una habitación del piso 34 del hotel Intercontinental. El cuerpo estaba tumbado en el suelo, encima de un gran charco de sangre y presentaba fuertes traumatismos en la cabeza y los genitales mutilados.
En palabras de algunos clientes del hotel, habían oído fuertes gritos en la habitación ocupada por los portugueses momentos antes de encontrar el cadáver. Al parecer ambos se habían enzarzado en una importante discusión que no acabó muy bien. Según Suzanne Divilly, clienta del hotel, se les oía discutir incluso desde otras habitaciones.
Pocas horas después de la llegada de la Policía, Renato Seabra fue encontrado y detenido en el hospital Bellevue. Aún se desconoce porque acudió a aquella unidad hospitalaria.
Por otro lado, en palabras concedidas al "New York Post", uma amiga de Carlos Castro era consciente del malestar que había entre ambos durante su estancia en Nueva York. Una tensión que pudo comprobar de primera mano en una comida que mantuvieron los tres el día antes del triste desenlace.
La amiga asegura que tras la comida quiso contactar con el periodista pero al no poder hablar con él por teléfono, decidió ir a verlo en persona al hotel. Fue en la salida cuando se encontró con el mismo Renato que le aseguró que "ese día no quería salir de la habitación".
La sociedad portuguesa ha recibido la noticia con gran sorpresa ya que Castro es uno de los habituales de la televisión lusa.
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