Bruselas

Los disidentes obligan a la OTAN a enviar 700 militares más a Kosovo

La OTAN reforzará su misión militar en Kosovo (KFOR) con el despliegue de un batallón de 700 militares de Alemania y Austria tras los incidentes registrados la semana pasada en dos puestos fronterizos del norte del país, un enclave poblado mayoritariamente por serbokosovares.

La unidad de refuerzo se unirá a las tropas de la KFOR en los próximos días, según han informado fuentes de la Alianza en Bruselas y Pristina. "La razón del despliegue es aliviar la carga de trabajo de las fuerzas encargadas actualmente de mantener la seguridad", ha indicado la portavoz de la OTAN, Carmen Romero.

"No es que la situación haya empeorado sino que las tropas de la KFOR han estado muy activas y su comandante considera que las tropas necesitan ser relevadas", ha añadido. La misión de la OTAN en Kosovo mantiene desplegado en la actualidad un contingente de unos 6.000 militares en la antigua provincia serbia. Varios diplomáticos han explicado que el batallón de refuerzo, compuesto por 600 militares alemanes y 100 austriacos, se ha mantenido destacado en situación de alerta en Alemania.

Las fuerzas de seguridad kosovares consiguieron hacerse el pasado martes con el control de los dos puestos fronterizos del norte del país, un enclave con población mayoritariamente serbia, aunque uno de sus agentes murió en los enfrentamientos con nacionalistas radicales serbios. Un día después, un grupo de serbios prendió fuego a uno de los puestos y disparó contra los soldados de la KFOR.

La misión de la OTAN decidió finalmente el jueves declarar zona militar protegida los dos puestos fronterizos y advirtió de que sus militares podrían recurrir al empleo de la fuerza para proteger estas instalaciones. Kosovo decidió tomar el control de los dos puestos fronterizos para prohibir la importación de productos procedentes de Serbia, después de que Belgrado decidiera impedir la exportación de productos kosovares.

El viernes, los militares de la OTAN se vieron obligados a regresar a sus bases después de que nacionalistas radicales serbios consiguieran bloquear las carreteras para impedir su llegada a los dos puestos fronterizos.

Serbia perdió el control sobre Kosovo en 1999 cuando la OTAN emprendió una campaña de bombardeos contra el régimen liderado por Slobodan Milosevic para impedir que siguiera masacrando a los albanokosovares.

Kosovo declaró su independencia en 2008 aunque los 60.000 serbokosovares que habitan en el norte del país no reconocen la autoridad de Pristina y siguen considerando a Belgrado como su capital.