Las ayudas a la agroalimentación se vincularán a la creación de empleo

Valladolid- Habrá ayudas importantes para las empresas agroalimentarias de Castilla y León. Hasta 450 millones de euros tiene previstos invertir la Consejería de Agricultura y Ganadera para consolidar a este sector, vital para el desarrollo económico y social de la Comunidad, especialmente en el medio rural, que factura cada año más de nueve mil millones de euros en las más de tres mil empresas que viven de la alimentación.

Pero serán unas ayudas especiales y vinculadas a la creación de empleo. Éste es el requisito que deberán cumplir las empresas que quieran optar a las líneas que convoca la Junta en esta materia y que hasta ahora no era una exigencia, sino que podría estar relacionada con una ampliación de instalaciones o una modernización. Así lo anunciaba ayer la consejera Silvia Clemente en los desayunos de la Agencia Ical, donde avanzaba también que a lo largo de esta legislatura la Consejería priorizará el aumento de la competitividad y el apoyo a la I+D+i, así como el fomento de la cooperación y asociacionismo, y fortalecerá la imagen de Tierra de Sabor. De la misma forma, el departamento agrícola y ganadero otorgará también una mayor puntuación a la compra de materias primas de la Comunidad. De hecho, en la actualidad el 48 por ciento de la que adquieren estas industrias procede de la propia Comunidad, mientras que la media española está en un 38.

Respecto a la marca ‘Tierra de Sabor', Clemente se felicitaba de los buenos resultados que está proporcionando a los productos de la Región, «ya que ha conseguido vincular a Castilla y León», y se comprometía a mantener su posicionamiento en la gran distribución e introducirla también en otros canales, como el comercio minorista. La internacionalización será clave también en los próximos años. Al respecto, la consejera avanza que está trabajando en colaboración con la Consejerá de Economía y Empleo en una plataforma única de salida al exterior con la presencia de Excal para conseguir colocar nuestros productos en todos los rincones del mundo.

Apoyo a la modernización
Durante el desayuno, los periodistas Rafael Monje y Luis Miguel Torres preguntaron a la consejera sobre cómo va afectar al campo la prórroga de los presupuestos de la Junta. Al respecto, Silvia Clemente aseguraba que hasta que no se conozcan las cuentas definitivas mantendrán los gastos que sean necesarios en cada departamento para un funcionamiento normal, y garantizar aspectos básicos como las políticas de seguros, a la que se dirige una media anual de 15 millones. Entre las líneas irrenunciables para la consejera de cara a los próximos meses se encuentran el apoyo a la modernización de explotaciones agrarias y ganaderas, o continuar con los pagos y subvenciones de los intereses de cerca de 10.000 préstamos ganaderos bonificados, «que han permitido -dijo- recuperar liquidez a muchas explotaciones», o mantener el apoyo a la remolacha, sector al que se ha destinado, desde la aprobación de la OCM, 24 millones de fondos propios.

Sector lácteo
Por otra parte, la consejera anunciaba que en los primeros días del mes de febrero se empezará a comercializar la leche de Castilla y León bajo el amparo de la marca ‘Tierra de Sabor'. Clemente avanzaba que se está ultimando la presencia de los envases en los lineales así como una campaña de promoción para llegar a los consumidores, y que la empresa Gaza (Ganaderos de Zamora) ha sido la adjudicataria del concurso para la producción de esta leche de calidad. «Estamos poniendo todo nuestro empeño y trabajando con las cadenas de distribución. Y todo ello para garantizar un precio a los ganaderos», destacaba la consejera de Agricultura, tras recordar que este proyecto será el primero que lleve a cabo directamente con el productor y sin intermediarios.

Un ‘bic agrario' para proteger el valor de las zonas de producción
Silvia Clemente anunciaba algunas medidas que se van a incluir en la futura Ley Agraria que el Gobierno Herrera aprobará a lo largo de este año. Entre ellas, llama la atención la nueva figura de protección o Bien de Interés Agrario (BIC Agrario) para «salvaguardar» el valor estratégico que tienen algunas zonas de producción de la Región y evitar que cualquier infraestructura pueda dañarlas. La consejera ponía como ejemplo los viñedos de la Ribera de Duero que podrían verse afectados por los tramos que faltan de la autovía del Duero. La Ley creará también un «banco de tierras» en el que se incluirán las parcelas sobrantes en las concentraciones parcelarias para fomentar la llegada de jóvenes al campo y dar respuesta a la falta de acceso a la tierra.