Falta sentido común por Iñaki Zaragüeta

No contentos con celebrar la manifestación contra la reforma laboral faltando al respeto a la conmemoración del atentado más grave cometido en España, los sindicatos se empeñan en alterar de alguna forma la tradicional «mascletà» del domingo. Las centrales sindicales no han atendido la petición de las víctimas del 11-M y han mantenido la fecha para su protesta en toda la nación. En Valencia, añaden la afrenta a uno de los eventos más arraigados de las fiestas falleras.

Para cualquier observador de buena fe, no tiene sentido el empecinamiento sindical en un recorrido que conecta con la congregación de otra masa social de carácter lúdico, a no ser que el objetivo real, aparte de clamar contra la política del Gobierno, se centre en dificultar el normal desarrollo del evento de la Plaza del Ayuntamiento. No es lógico, cuando el recorrido ofrecido finalmente -calles Xátiva, Colón, etcétera- es suficientemente céntrico y de ninguna forma entorpece las intenciones de los organizadores.

Pienso que la Delegación del Gobierno y el Ayuntamiento aciertan al prever posibles contingencias. Así lo corroboran los informes de la Policía Local, Jefatura Superior de Policía y la Unidad de Protección Civil.

Los sindicatos deberían reflexionar que, para obtener el respeto hacia sus actuaciones, debes practicar el ejercicio de la reciprocidad. En este caso, respetar los deseos de los demás. Las Fallas se merecen el respeto y la reciprocidad. Un modo de mejorar su deteriorada imagen. Así es la vida.