Francisco Reyero: «Acojona la prima de riesgo sin saber qué es»

–Si Wikileaks es, según Daniel Estulin, una tapadera de la CIA, ¿qué es su «Wiskilis»?
–Lo que algunos bebemos para ver lo que no se ve, para descubrir los pequeños detalles cotidianos.

–Cuenta cosas que parecen mentira y son verdad. Aquí se da eso mucho, ¿no?
–Estamos acostumbrados a lo maravilloso. Aquí, la mentira es un gaje del oficio, sobre todo en la política, pero la realidad, como dice Carlos Herrera, supera al disparate.

–Lo suyo, dicen, es otra forma de ver la realidad. ¿Para descubrir qué?
–Lo que no me cuentan habitualmente, para situar la mirada donde yo quiero.

–Bueno, yo voy leyéndole realidades y usted pone su guinda. Los ricos «indignados» se ofrecen a pagar más impuestos.
–Lo hacen porque son muy visibles a su pesar. Yo desconfío de la bondad.

–En la India hay una bebida de orín de vaca buena para la memoria.
–Ni catarla. ¿Para qué? ¿Para acordarme de lo que debo?

–Artur Mas dice que no le toquen las narices con el catalán.
–Deben recordar los catalanes lo que decía Pla: «Fabricamos muchos calzoncillos y no hay tantos culos en Cataluña».

–El 38 por ciento de los europeos sufre trastornos mentales. Debe de ser por la crisis.
–La prima de riesgo acojona sin conocerla, sin saber qué es.

–España, camino de una nueva recesión.
–Hemos llegado al fondo, ahora nos queda el «Viaje al centro de la Tierra».

–Cada vez más gente encuentra en internet a su pareja ideal.
–La gente no quiere olerse ni verse: hoy se teclean las carnes por internet.

–Arrestan a un hombre por morder a una serpiente.
–Habría que contratarlo para las campañas electorales.

–Un francés, condenado a pagar 10.000 euros de multa a su esposa por no cumplir en la cama durante años.
–Me imagino que la mujer se habrá gastado el dinero en un gigoló.

–Está de moda la dieta Cospedal: adelgaza un 20 por ciento el gasto público.
–El gasto público de este país necesita la dieta Dukan, la Montignac, la de la alcachofa, la macrobiótica, la del doctor Atkins, la ayurvédica y la hipocalórica juntas.

–Rubalcaba-Belén Esteban, el careo más esperado por el personal.
–Que tiemble Rubalcaba.

–Quedaría muy propio lo de «¡Alfredito, cómete el pollo, coño!»