Sevilla

OPINIÓN: Candidato imprudente

La Razón
La RazónLa Razón

No está confirmado que los responsables de la muy imparcial televisión municipal deformen el 15 de febrero la voz de Juan Ignacio Zoido hasta convertirlo en un remedo de Darth Vader y le pongan una máscara como la del doctor Lecter en «El silencio de los corderos» que deje bien claro ante la audiencia que se trata de un personaje siniestro. No captaría el televidente medio insinuaciones más sutiles, me temo, pero cosas más burdas saben hacer en los informativos de Telemontaño para escándalo incluso del órgano censor en manos del PSOE encargado del negociado audiovisual. Resulta insólito que en un debate a tres, dos intervinientes encarnen al gobierno y sólo uno a la oposición pero éstas son las particularidades de la democracia en Sevilla, una ciudad de tres cuartos de millón de habitantes en la que un partido marginal que apenas supera los 25.000 votos ejerce un poder omnímodo. Por bemoles ha habido que convidar a Torrijos, con las mismas posibilidades de llegar a alcalde que un servidor de ser obispo de Tuy, a esta ceremonia de juego cruzado contra el PP de la que el ex magistrado puede salir escaldado por dos cuestiones: ni son aconsejables los cara a cara televisivos para quien marcha en cabeza en las encuestas; ni garantiza Giralda TV la mínima neutralidad exigible en democracia. Es como poner a un pedófilo de gerente en una guardería.
en una guardería.