Artistas

Y ahora a por el Albéniz

Los «okupas» del Hotel Madrid quieren «tomar» el teatro. Se enfrentaron a la plataforma que vela por la antigua sala

Aunque de momento no han entrado en el Albéniz, los «okupas» ya se han apropiado de la fachada del teatro colgando pancartas y carteles
Aunque de momento no han entrado en el Albéniz, los «okupas» ya se han apropiado de la fachada del teatro colgando pancartas y carteleslarazon

Madrid- Algunos de los «okupas» del Hotel Madrid no se conforman con su nueva posesión. Ahora quieren ir a por el Teatro Albéniz, propiedad de la familia Moro desde que quebró la inmobiliaria Monteverde. La idea que tiene este grupo de «indignados» es convertir estas instalaciones –clausuradas desde diciembre de 2008– en un «espacio cultural autogestionado». Una propuesta que ha generado discrepancias, sobre todo con la Plataforma de Ayuda al Teatro Albéniz, que lleva más de cinco años luchando para que sea declarado Bien de Interés Cultural. En junio, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid dictó una sentencia favorable a que fuera considerado BIC, aunque los propietarios interpusieron un recurso de casación contra ella. Aun así, la declaración fue recibida con gran alegría por parte de la plataforma, ya que así lo protege del derribo. Precisamente por tanto tiempo de esfuerzo, los defensores del Albéniz no quieren que se «invada». La presidenta de la plataforma, Eva Aladro aclaró a este periódico que «se consideran parte del 15-M», pero no están de acuerdo con la acción «de esta minoría recién llegada y sin legitimidad en el movimiento» de ocupar el teatro. En el manifiesto que se leyó ayer en la asamblea, la plataforma aclaró que «siempre lucha a través de las vías legales, nunca usando la violencia» y añaden que todos los ciudadanos deben decidir los usos del teatro. Además, insiste en que no todos los «indignados» están detrás de la intención de entrar en el Albéniz, sino que son un grupo formado por «okupas y antisistema», como los que se negaban a abandonar el campamento de Sol aun cuando lo aprobó la mayoría. «Durante la asamblea de ayer, que fue un caos, llegaron a decir que no les importaba el 15-M», aseguró Aladro. «Si finalmente ocupan el Albéniz será en contra de nuestra plataforma y del movimiento, aunque se han puesto medios para intentar que eso no suceda», concluyó.