El Cairo

Entran en Egipto los 25 presos egipcios canjeados por el supuesto espía israelí

Los 25 presos egipcios que Egipto e Israel acordaron canjear por el sospechoso de espionaje israelí Ilan Grapel entraron hoy en Egipto bajo fuertes medidas de seguridad, según difundió la televisión estatal. Los primeros en cruzar la frontera con Israel, a la altura de la localidad egipcia de Taba, fueron tres menores de edad, a los que les siguieron los demás presos.

Fuentes de seguridad egipcias afirmaron a Efe que los presos fueron conducidos a una sala donde fueron reconocidos por los jefes de sus respectivas tribus antes de que Egipto procediera a la entrega de Grapel. Una vez culminado el reconocimiento, Grapel partió del aeropuerto de El Cairo en un avión particular privado israelí hacia Tel Aviv, informaron las fuentes consultadas.

En el sur de la península del Sinaí, uno de los menores egipcios liberados, de nombre Salah, afirmó al canal televisivo que pasó tres meses y quince días en prisión tras entrar de forma clandestina en Israel. "No volveré a hacerlo, tengo sentimientos que no puedo describir pero gracias a Dios que estoy de nuevo en mi país", aseguró.

Otro de los presos, Mesalem, destacó que en los seis años que pasó en la cárcel "el trato fue difícil y me sentí discriminado". A su llegada, los ciudadanos egipcios fueron recibidos por el gobernador del sur del Sinaí, Jaled Fauda, y otras autoridades locales, que les entregaron coronas de flores y banderas.

El canje de presos entre Israel y Egipto tuvo lugar hoy después de que el pasado 18 de octubre el soldado israelí, Guilad Shalit, fuera intercambiado por más de mil presos palestinos con la mediación de Egipto.

Aunque en un principio las autoridades egipcias pensaron en canjear a Grapel por un número mayor de presos, finalmente fueron 25 personas que cumplían diversas penas por delitos como el tráfico de drogas y mercancías o la entrada ilegal en Israel.

Por su parte, Grapel, de 27 años y de nacionalidad israelí y estadounidense, estaba acusado por la Fiscalía General egipcia de "espiar contra Egipto con la intención de dañar sus intereses económicos y políticos".

Según los servicios secretos egipcios, el joven fue enviado a Egipto para reclutar a algunas personas, llevar a cabo actividades de espionaje y recolectar informaciones sobre la Revolución del 25 de Enero, que puso fin al régimen de Hosni Mubarak.

Asimismo, se le acusó de instigar a los manifestantes a llevar a cabo disturbios que afectaron al orden público y a generar una brecha entre el ejército y el pueblo con la intención de propagar y la inestabilidad y afectar negativamente a la revolución.

Las informaciones de los servicios secretos apuntan a que el acusado formó parte del Ejército israelí y participó en la guerra del verano de 2006 entre Israel y el grupo chií libanés Hizbulá.

Egipto luchó contra Israel en cuatro guerras -1948, 1956, 1967 y 1973-, que culminaron con un tratado de paz firmado en Washington en 1979, pero los lazos bilaterales siempre han sido distantes.

Además, la relación se han deteriorado últimamente después de que un ataque de la aviación israelí causara en agosto la muerte de seis efectivos egipcios en una zona fronteriza, lo que desencadenó el pasado 9 de septiembre el asalto a la embajada de Israel en El Cairo.