Barcelona

El Gordo de Las Vegas

La Razón
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Como no salgamos de dudas, pronto no va a quedar ayuntamiento madrileño sin levantar la mano para ver si le toca la lotería del Gordo de las Vegas. Madrid capital, Alcorcón, Leganés, Getafe y la candidatura más folclórica de El Molar. Todas, con más o menos intensidad, quieren recibir como si fuera Mister Marshall una inversión «muchimillonaria» que en la mayoría de los casos borraría de un plumazo el paro en el municipio. Lo mejor sería ponerse de acuerdo, no vaya a ser que por tener una oferta sobredimensionada se acabe marchando el «maná de Nevada» a la zona de El Prat en Barcelona, que es la otra competidora que viaja en puente aéreo. Y mejor aún sería definir cuanto antes las líneas rojas, delgadas o gruesas, a las que no se piensa renunciar desde las administraciones españolas para conseguir la inversión.
Concesiones ha habido siempre; exenciones también. Es más: hemos hecho autopistas a todo trapo y estaciones de Cercanías a todo tren para conseguir que Piolín y Bugs Bunny vinieran hasta San Martín de la Vega y no sería la primera vez. Pero otra cosa es tomar nuestras leyes como si fueran de plastilina con tal de agradar al cowboy.
Negociación sí, siempre. Es obligación de los políticos estirarla hasta el extremo. Pero claudicación no, nunca. Porque Madrid no puede ser Macao. Eso sí, si encargan un logo o un cartel, ¡mucho ojito! que con esto de la publicidad menuda semana le estamos dando al pobre Don Draper.