Historia

Barcelona

El buen arte de dialogar

La Razón
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En Barcelona, su pueblo y el mío, se murió hace unos días Joaquín Soler Serrano. Creo que pocas veces ha habido por parte de la Prensa tanta unanimidad para dedicar espacio a un periodista. La verdad es que, aunque estas líneas lleguen con retraso, Soler Serrano merecía ese recuerdo.
Hace algunos años, Gonzalo Herralde tuvo la estupenda idea de recuperar primero en vídeo y luego en DVD algunas de las entrevistas que el maestro Soler Serrano realizó en el inolvidable programa de televisión «A fondo». Digo entrevistas y no debería llamarlas de esa manera porque son diálogos, son ejemplos de como se podía establecer una conversación que enriquecía intelectualmente a los espectadores. Soler Serrano fue nuestro Pivot, sin necesitar a un Bukowski borracho. Él tuvo ante sus cámaras una de las mejores escuderías de representantes del mundo de las letras y las artes. Solamente necesitaba dos sillas y una mesa para sacarle punta al lápiz de Borges, Cortázar, Alberti, Cela y muchos más. Su charla, por ejemplo, con Luis Rosales es hoy de una profunda emoción al retratar uno de los dramas de la Guerra Civil.
Se ha hablado mucho del diálogo televisivo que tuvo con Pla, y es justo recordarlo como un hito de lo que es una televisión cultural. Uno piensa si de todo eso hay sucesor, y solamente veo algo parecido en «Página 2».