Vacaciones activas en la costa de Marruecos

Apenas dos horas de vuelo son suficientes para aterrizar en un destino exótico y sorprendente a los ojos del viajero acostumbrado a los paisajes de la Península Ibérica. Marruecos fascina por sus contrastes, en los que largas playas de arena fina conviven con antiguas ciudades de cultura arraigada. Buen ejemplo de ello es Agadir, al oeste del país, en cuyas calles se esconden un ajetreado zoco, la medina, el coqueto puerto y la sorprendente kasbah –antigua fortaleza–. Y a sólo un kilómetro de la ciudad, el Iberostar Founty Beach, un cuatro estrellas con sello español que se convierte en la morada ideal para los que buscan relax sin renunciar al entretenimiento.
Situado a tan sólo 25 kilómetros del aeropuerto de Al Massira, la comodidad de los trayectos es, si cabe, uno de los puntos fuertes que agradece el huésped, sobre todo si se viaja en familia. No en vano, una vez en el interior del establecimiento, apenas hacen falta unos minutos a pie para «plantarse» en la playa. Y no es un arenal cualquiera, pues la playa de Founty cuenta con nueve kilómetros de longitud.
 Los apasionados de los deportes acuáticos están de enhorabuena. A 200 metros del hotel el huésped puede hacer windsurf, alquilar una moto acuática o subirse a un hinchable en el Centro Deportivo del Agua. Aunque, sin salir del recinto del establecimiento, en la amplia piscina exterior puede divertirse practicando aeróbic acuático o volley-ball. Y si lo suyo es el golf, un poco más allá tiene a su disposición el campo de Dunes. Pero si lo que quiere es aprovechar sus días de vacaciones para compartir más tiempo con los niños de la casa, sin salir del hotel puede divertirse con el billar, los dardos, la petanca, el baloncesto o el ping-pong.

Según la edad
Si hay un lugar pensado para los más pequeños de la casa, ése es el miniclub. Abierto durante todo el año y con actividades específicas según la edad de los más pequeños, como deportes o actividades manuales, el centro cuenta con la supervisión de profesionales que garantizan el entretenimiento sin riesgos.
Después de tanto ajetreo no es de extrañar que en algunos casos flaqueen las fuerzas. Para compensar, una sala de masajes, un centro deportivo de fitness, un mini spa y una sauna son las instalaciones del Iberostar Founty Beach que garantizan al viajero el relax.

Cocina local
El descanso abre el apetito y por ello el establecimiento cuenta con varias propuestas para saciar el pecado de la gula. Merece la pena darse un buen homenaje a base de cocina típica de Marruecos en el elegante restaurante Mercure. Sin dejar de lado la gastronomía local, el restaurante Antares ofrece al comensal especialidades marroquíes e internacionales.
 Para picar algo entre horas y quitar el hambre, nada mejor que el snack bar, donde el viajero puede comer algo ligero como una ensalada, una pizza o un helado.
Antes de ir a dormir hay que pasar por el bar Cassiopee, el rincón perfecto para tomar una copa hasta las once de la noche. Y más tarde, es el turno de dormir en una espaciosa habitación totalmente equipada.
 

>> Dirección: B. P. 1039, Cité Founty 80000, Agadir, Marruecos.
>> Capacidad: 470 habitaciones entre las que se incluyen 292 habitaciones dobles, 52 superiores, 6 suites, 116 familiares y 4 habitaciones habilitadas para personas con discapacidad.
>> Instalaciones: dos restaurantes, miniclub infantil, spa, piscina exterior y zona deportiva.
>> Contacto: en el teléfono +212 528 84 44 44 e iberostar.com.