Italia amplía a 65000 millones de euros su ajuste

Según algunas informaciones, entre aumentos de impuestos y recorte de gastos, el Ejecutivo prevé ahorrar hasta 65.000 millones de euros en los próximos cuatro años. La parte más dura del plan de ajuste llegará en 2013 y 2014, lo que supone un legado envenenado para el Gobierno que esté en el poder en la próxima legislatura.

La reestructuración será examinada en el Parlamento hoy y mañana. Aunque no se espera que la oposición de centro izquierda la apoye, es poco probable que sea rechazada, pues el partido de Berlusconi y sus aliados mantienen una ligera mayoría en la Cámara de los Diputados y en el Senado. La situación es incierta porque el plan ha levantado ampollas en un sector de la formación de «Il Cavaliere».

Las medidas más protestadas por los parlamentarios son la abolición de los colegios profesionales y la imposibilidad de compaginar el cargo de diputado o senador con el de alcalde o presidente provincial.

Los ajustes han sido diseñados por el ministro de Economía, Giulio Tremonti, considerado por los mercados el gran defensor de la estabilidad presupuestaria de Italia. El plan puede ser su última creación en el Gobierno, pues Silvio Berlusconi planea deshacerse de él lo antes posible. La semana pasada cargó abiertamente contra Tremonti en una entrevista, lo que aceleró los ataques de los especuladores al país. El titular de Economía afirmó ayer que se debe volver a las privatizaciones aunque debido a las pocas empresas estatales que quedan, será el turno de los municipios.

La otra gran voz de la economía del país, Mario Draghi, próximo presidente del Banco Central Europeo (BCE), también intervino ayer para pedir al Ejecutivo que haga verdaderas reformas estructurales.