Los manifiestos de los sindicatos

2011 Complicidad con el Gobierno del PSOE
A diferencia del tono empleado este año, en el pasado, con el PSOE en el poder, los sindicatos fueron mucho más condescendientes con el Gobierno en su manifiesto del Primero de Mayo pese a que la Encuesta de Población Activa arrojaba una tasa de paro del 21,29% y la economía daba claros síntomas de empeorar. UGT y CC OO arremetían contra la reforma laboral que desembocó en la huelga general de septiembre de 2010, pero sin culpabilizar expresamente de ella al Ejecutivo. Los sindicatos elogiaron incluso el acuerdo social pactado con el PSOE.

2012 Ataque a las reformas y al «neoliberalismo»
Los sindicatos emplean este año en su manifiesto un lenguaje mucho más beligerante que en 2011. En él, se ceban con el «neoliberalismo» y el «pensamiento económico conservador», y se jactan de un supuesto éxito «incuestionable», al atraer a las calles en la última huelga general a, según dicen, «más de diez millones de trabajadores y trabajadoras». A pesar del agujero dejado en herencia por el PSOE y la necesidad de taparlo con medidas de ahorro, UGT y CC OO arremeten de forma frontal contra los recortes, subrayando que la «prioridad no es el empleo».