El Louvre se pasa a las luces LED

La emblemática pirámide de acceso al Museo del Louvre ha inaugurado esta semana una nueva iluminación basada en diodos de emisión de luz (LED) permitirá a la pinacoteca parisina ahorrar un 73 por ciento de la energía destinada iluminar el monumento y parte de la fachada. A lo largo del próximo año, toda la iluminación exterior del museo se realizará con este tipo de luminarias en un proyecto que se ha gestado junto a la compañia japonesa Toshiba. A la finalización del mismo, el Louvre habrá reemplazado un total de 4.500 lámparas de xenón por 3.200 puntos de iluminación LED de Toshiba, lo que permitirá disminuir la potencia necesaria para iluminar el entorno desde los 392.000 vatios actuales a sólo 105.000. También bajarán los costes de mantenimiento, ya que el museo se iluminará con un 28 por ciento menos de puntos de luz y éstos tienen 40.000 horas de vida útil, un 80 por ciento más que las actuales.
Desde el punto de vista estético, los responsables de Toshiba han cumplido con los requerimientos del museo de que el cambio en la iluminación se ajustase al aspecto que presentaba hasta ahora la pirámide del arquitecto de origen chino Ieoh Ming Pei. Para Masami Fukuda, director de Toshiba lighting a nivel mundial, «éste ha sido un gran reto tecnológico en iluminación exterior y hemos aprendido mucho». Además del ahorro energético y la duración, las ventajas que aporta el LED frente a las bombillas de bajo consumo son la ausencia de mercurio, el encendido inmediato y la ausencia de calor. Por su parte, el director del Louvre, Henry Loyrette, declaró en la ceremonia de encendido que «es un paso más en la arquitectura de un museo que siempre está en constante evolución. Ha sido un trabajo fantástico». Tras esta intervención sobre un monumento emblemático, la compañía japonesa busca llevar a cabo actuaciones similares en muchos espacios públicos de ciudades de todo el globo, incluida España, donde por ejemplo Ceuta puede ser el escenario de un proyecto de iluminación urbana para que la ciudad autónoma ahorre en su factura energética. Respecto a si la implantación de LED tiene futuro en un escenario de crisis, François Seguineau, vicepresidente de la división de iluminación de Toshiba en Europa se muestra optimista pese a la delicada situación económica del continente, ya que «la población y los gobiernos están concienciados de que es preciso ahorrar energía para relanzar la economía. Pero para el consumidor doméstico todavía puede ser un poco pronto para un cambio masivo a estas luces, que todavía deben ajustar sus precios. Esto llegará previsiblemente en 2013». A pesar de que el gasto inicial para instalar LED en casa es hasta cuatro veces mayor, la inversión puede recuperarse en un año gracias al menor consumo y la vida útil.