La UE conocía el plan de Rajoy sobre el déficit

BRUSELAS- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, abrió esta semana en Bruselas el melón sobre la necesidad de ser realistas y comenzar a ser flexibles en los objetivos intermedios de reducción del déficit para no afectar al crecimiento de la UE. Un anuncio que muchos han entendido como un desafío, pero que fuentes conocedoras de la negociación niegan. «En Bruselas sabían perfectamente que España no iba a fijar el objetivo en el 4,4%. Un dirigente extranjero de los muchos que habló con Rajoy le reconoció que España no podía llegar a ese límite porque sería como "matar"al país», explican las citadas fuentes.

Si el Ejecutivo español ha dado este paso no ha sido con intención de echar un pulso a Bruselas, sino forzado por el calendario. «La elaboración de los presupuestos ha obligado a España a ser el primer país que hace un ejercicio de realismo, que a buen seguro van a hacer otros países en mayo y junio», explican los consultados.

Y es que diversos países tienen los mismos problemas que España para cuadrar sus cuentas. Además de Grecia, pendiente de concluir la operación de canje de deuda con los acreedores privados para recibir el rescate de 130.000 millones, y Portugal, otros países como Holanda, Irlanda o Italia, que no están bajo el control férreo de Bruselas, se están encontrado con que las previsiones de crecimiento están deteriorando sus expectativas de cumplir los objetivos de déficit.


La austeridad holandesa
El caso de Países Bajos es uno de los más sintomáticos por ser uno de los paladines de la austeridad. Las estimaciones de su oficina de estadística apuntan a que el déficit ascendería en 2013 al 4,5% y se mantendría por encima del techo del 3% al menos hasta 2015. Ello ha despertado un debate nacional que se verá reflejado las próximas semanas en las conversaciones previstas entre el gobierno minoritario de centro derecha y su socio parlamentario, el Partido por la Libertad de extrema derecha, Geert Wilders, que se opone a nuevos recortes.

Sin embargo, el ministro de Finanzas holandés, Jan Kees de Jager, ha advertido de que hará los recortes. «No iré a mendigar a Bruselas », advirtió, al tiempo que recalcó que para él es una «exigencia absoluta que Holanda, sobre todo porque hemos hecho todo lo posible para tener unas reglas presupuestarias estrictas, se atenga a estas reglas». No obstante, recalcó que «las reglas no prescriben que en todos los casos, y sin ningún excepción, un porcentaje dado debe ser alcanzado en un año determinado». Dicho esto, advirtió de que «no lamenta nada» que su país haya mantenido una línea muy dura en materia de disciplina presupuestaria.


El referéndum irlandés
Un caso diferente es el de Irlanda, que la pasada semana anunció que someterá a referéndum el nuevo Tratado fiscal europeo, en lo que será la primera votación popular al plan liderado por Alemania con vistas a incrementar la disciplina presupuestaria en la eurozona. El Gobierno se ha mostrado confiado en que el electorado entenderá la «importancia y necesidad» del tratado y lo «apoyará con un sí a la continua recuperación y estabilidad», aunque el apoyo de los irlandeses a la UE se ha enfriado en los últimos tres años en un clima de recesión económica y fuertes recortes. Y eso que, a cambio de estos ajustes, el país ha recibido un rescate financiero de la UE y el FMI para paliar sus problemas de acceso a los mercados de financiación provocados por el colapso del sistema financiero.

Por su parte, el primer ministro italiano, Mario Monti, ha aplicado a rajatabla las recetas que le ha dado la UE, pero sólo ha conseguido un déficit público del 3,9 % del PIB en 2011. No obstante, la cifra supone una importante bajada respecto al 4,6 % de 2010 y mejora una décima las previsiones de la Comisión para Italia.


Medidas de estímulo
Con los dos planes de ajuste que aprobó en verano, Italia espera lograr el equilibrio presupuestario en 2013. Desde el momento en que llegó al poder, Monti emprendió las reformas más urgentes y ahora discute con los agentes sociales las siguientes. Sin embargo, tiene claro que sólo con austeridad no se sacará a Europa del atolladero. «Si se quiere tener un fortalecimiento de la gobernanza de la unión económica y monetaria, no basta con tener un fortalecimiento de la gobernanza de la Unión Monetaria», sino que es preciso impulsar «los aspectos de fiscalidad que acompañan a una moneda sana», planteó.

Cameron anuncia más recortes
El primer ministro británico, David Cameron, defendió ayer los recortes en el sector público, como la Sanidad, por considerarlos «inevitables» y «urgentes» dada la difícil situación económica por la que atraviesa el Reino Unido. El jefe del Gobierno se dirigió ayer a los miembros de su partido, el Conservador, en una reunión privada que celebran a puerta cerrada en Londres, en la que defendió sobre todo las medidas de reducción de gastos que se aplican en el Servicio Nacional de Salud (NHS).