Álvaro Sáenz de Heredia: «Querría abrir la caja fuerte de Rubalcaba»

–«Cambalache» se anuncia como una comedia políticamente corrupta. ¿A quién no le hará gracia?
–Me imagino que al poder, al Gobierno.

–¿Es la comedia de un indignado?
–De un espectador de la vida que se lamenta con humor de lo que ve.

–Me imagino que el título lo ha tomado del tango de Discépolo...
–Sí, el argentino lo clavó: «El mundo fue y será una porquería, ya lo sé...»

–¿Ahora más que nunca?
–Los latinos tendemos más que otros a la corrupción, aunque seamos mejores en otros aspectos. Y ésta crece cuando impera el «todo vale».

–«El que no llora, no mama, y el que no afana es un gil», dice el tango. ¿Se lo lleva todo el que puede?
–Eso sucede aquí y en todos los sitios.

–¿Usted también se lo llevaría crudo si se le presentara la ocasión?
–No le puedo decir que no. La carne es débil y el bolsillo, más. Mejor que no me vea en esa situación.

–En su comedia, el ladrón que entra a robar y la señora de la casa pactan para abrir la caja fuerte del marido de ella...
–Así ella descubre que él le es infiel y otras cosas feas. Ladrón y señora de la casa unidos por la codicia y el sexo para chantajear al señor, que es un alto cargo de Interior corrupto. Luego es él quien les chantajea a ellos.

–Vaya grupo...
–Sí, es una obra sin buenos.

–¿Así ve el país, a falta de buenos?
–No. Lo que faltan son ideales y patriotismo. Está mal visto ser patriota español y bien visto ser patriota vasco o catalán.

–¿La caja fuerte de quién le gustaría abrir?
–La de Rubalcaba.

–Ricos «indignados» se ofrecen a pagar más impuestos en Estados Unidos y Francia. ¿Lo harán también los ricos de aquí?
–Es posible que se contagien. Tendrían que dar ejemplo los banqueros bajándose los sueldos y los bonus.

–Hay quien dice que ya siempre estaremos en crisis, más o menos.
–Si gastamos más de lo que ingresamos, siempre lo estaremos, sí.

–Un «reality» en Hong-Kong convierte a los millonarios en barrenderos...
–Buena idea. Quizá pronto lo veamos aquí. Y que participen los banqueros: saben barrer muy bien.

–Los de alguna caja de ahorro parece que preferían la aspiradora...