ANÁLISIS Puede quebrar España

¿Por qué existe el peligro de contagio de unos países a otros en esta crisis?
– La caída de un miembro del euro desencadena un efecto dominó sobre sus vecinos, cuyos bancos dejarían de cobrar las deudas de los estados a los que prestaron el dinero. Y los importes son muy grandes. Los bancos españoles ostentan más de 100.000 millones de deuda portuguesa. Por eso es tan importante una solución duradera y común.

¿Puede quebrar España?
– No pensamos que España vaya a quebrar o a ser rescatada. España tiene el dudoso honor de ser el primer país de la Historia que se arruinó –con Felipe II, en 1557–. Hemos tenido una quiebra cada 50 años. Lamentablemente, hemos tenido una carencia histórica de emprendedores, lo que ha obligado al sector público a incurrir en grandes gastos, y éstos no siempre se ven compensados por los ingresos. Sin embargo, en esta ocasión, podemos esquivar la situación si hacemos los deberes. De hecho, los inversores confían en la capacidad de España para pagar sus deudas, como muestran los datos de las subastas del Tesoro de este año, que han ido bien. La deuda emitida es superior a las necesidades reales, por lo que estamos cubiertos por un tiempo si la situación empeora y se acercan los vencimientos.

¿Puede España aguantar con una prima de riesgo por encima de los 300 puntos básicos?
– Sí, pero eso representa destinar el dinero de los impuestos y el ahorro de los recortes a pagar intereses y no a crear empleo y mejorar la economía. De hecho, la partida destinada a financiar los intereses de la deuda ha pasado de 23.000 millones en 2010 a 28.000 millones en 2011. Sólo un diferencial sostenido sobre los 400 puntos y unos intereses por encima del 7%/8% para la deuda pública nos llevarían a una situación complicada.