Huelga de estibadores

El portavoz de los controladores responde a los lectores

Los controladores afrontan este jueves su Día D, el momento en el que tendrán que ratificar en asamblea el preacuerdo alcanzado con AENA. ¿Será el final del conflicto o sólo un punto y seguido? Ya puede enviar sus preguntas al portavoz de los controladores, César Cabo.

El portavoz de los controladores responde a los lectores de LARAZON.es
El portavoz de los controladores responde a los lectores de LARAZON.eslarazon

Cabo se ha convertido en las últimas semanas, por obra y gracia de uno de los conflictos laborales más enconados de los últimos meses, en una figura de la primera línea de la actualidad. Él ha sido el encargado de explicar a la opinión pública las bondades de las reivindicaciones de los controladores aéreos, un colectivo cuestionado por una parte de la sociedad.

 

Pero, además, la imagen de Cabo ha trascendido la mera negociación, hasta el punto de inspirar grupos de apoyo y admiración en Facebook, como el ya famoso "César Cabo, contrólame a mí".

 

¿Son justas las demandas de los controladores? ¿Como ha sido la negociación con AENA? ¿Será el final del conflicto? Envíe pinchando aquí sus preguntas a Cabo, que responderá el próximo miércoles.

ASÍ ES EL ACUERDO FIRMADO CON AENA:

El documento de "base"acordado y firmado por los dos máximos representantes de AENA y USCA, tras una negociación que duró más de cinco meses, en una mesa integrada por seis miembros del ente público y diez de los controladores, permite a Fomento reducir las tasas de ruta un 15% y a los trabajadores mejorar la carga de trabajo aunque sea a costa de una reducción salarial.


El acuerdo, que se ha basado en la tabla reivindicativa de doce puntos presentada por USCA, se enmarca en la ley de 14 de abril sobre la prestación de los servicios de navegación aérea, así como en el real decreto sobre los tiempos de actividad y descanso aprobado hace unas semanas.

Respecto a la jornada laboral, uno de los principales escollos planteados en la negociación por los controladores, se ha acordado que será de un máximo de 1.670 horas anuales, tal como establece la ley, a la que se añadirán 80 horas extras.

El segundo punto conflictivo era el de las retribuciones, que se han fijado en un salario medio anual de 200.000 euros, lo que supone, aproximadamente, una rebaja de un 40% con respecto a la media anterior anual que estaba en torno a los 350.000 euros.