Bruselas
Mas fue a Moscú «a situar el país»
Tras la polémica por Rusia, prepara viaje para el miércoles a Bruselas
BARCELONA– El presidente de la Generalitat justificó ayer su polémico viaje a Rusia porque tiene la obligación, desde su cargo, de «situar al país lo mejor posible en el exterior». Desde un mitin vespertino en Igualada, argumentó que «aunque estemos a pocos días de las elecciones», tiene que «hacer de presidente» y eso incluye el viaje a Rusia para estrechar lazos comerciales.
Artur Mas quiso así acallar la polémica, que se ha instalado en el Palau de la Generalitat y no sólo por el pim-pam-pum propio de la precampaña electoral. Los últimos pasos que ha realizado están dando suficiente munición a la oposición para plantar cara a una CiU que busca la mayoría absoluta para poder llevar a cabo sus planes secesionistas, que explicará el miércoles en Bruselas.
Ayer la indignación entre la oposición era evidente por el viaje del presidente de la Generalitat a Rusia, acompañado por un amplio séquito con hasta catorce altos cargos del Govern, y después de una semana que arrancó con la polémica por el vídeo electoral institucional animando a votar el 25 de noviembre que la Junta Electoral Central (JEC) obligó a retirar por partidista.
Aluvión de críticas
La presidenta del PP catalán exigió a Mas que pida perdón por su «lujoso» viaje a Moscú en el que, junto con su esposa, se alojó en el hotel Radisson Royal Moscow, cuyas habitaciones llegan a los 1.600 euros la noche en el caso de la suite principal. Para la candidata popular no es de recibo que el president haga un viaje de estas características cuando la crisis pasa factura a millones de hogares. «Mientras los catalanes se aprietan el cinturón para llegar a fin de mes, Mas se ha gastado el dinero de todos, algo que requiere de explicaciones y, si no, la devolución del coste de este viaje de lujo», apuntó Alicia Sánchez-Camacho.
En la misma línea se expresaron los candidatos del PSC, Pere Navarro, y Ciutadans, Albert Rivera. Todos, además, pusieron sobre el tapete que Mas se ha topado con la realidad, puesto que, aunque aprovechó la inauguración del Fórum Empresarial Cataluña-Rusia, para reivindicar sus planes secesionistas, no logró una agenda de reuniones de nivel, más allá del gobernador de la región de Moscú y la viceministra de Cultura. «No ha conseguido que nadie hiciera caso en su intención de internacionalizar el conflicto catalán», aseveró Sánchez-Camacho.
Antes de que Mas se justificara, Oriol Pujol desdeñó las críticas al viaje sin hacer alusión ni al hotel de lujo ni a la amplia comitiva que acompañaba al president a la tierra de los antiguos zares. «Tal y como se ha planteado el supuesto escándalo, da risa si resulta que el presidente de Cataluña no puede hacer una acción de promoción en Rusia, un mercado importante para los productos catalanes», aseguró Pujol. Josep Maria Pelegrí, que hacía tándem con Pujol para evidenciar las buenas relaciones entre Convergència y Unió tras las discrepancias públicas mostradas por Duran Lleida, vio el asunto como un conflicto Cataluña-España. «Hay una serie de gente desde Madrid que lo que querría es precisamente que no hiciéramos nada de nada», apuntó el conseller.
Internacionalizar el conflicto
Cuando no ha acabado la polémica por este viaje, ya comienza el run-run del próximo. Mas irá el miércoles a Bruselas y no precisamente en misión comercial, sino que, siguiendo sus palabras, viaja para internacionalizar el conflicto. Pronunciará en inglés –mismo idioma en que ayer la Generalitat envió la convocatoria a los medios de comunicación– una conferencia sobre sus planes secesionistas y después atenderá a los medios en la «embajada catalana». La conferencia lleva por título «Destino Europa: El futuro de Cataluña en la Unión Europea».
De momento, los partidos se han unido para que Mas explique en el Parlament el uso de los 5.370 millones del rescate que ha solicitado al Fondo de Liquidez Autonómico. La comparecencia fue aprobada esta semana y, como el president tiene 30 días para hacerla efectiva, se puede postergar hasta después de las eleciones.
Mientras, la tensión aumenta y especialmente el marcaje CiU-PP. Ayer Pujol relegó al PSC de la batalla electoral porque le ve desnortado. «Nos acabaraemos entreteniendo con un partido socialista sin norte, que no sabe dónde está, ni qué pretende, ni qué explica, ni qué propone». Previamente, les había tenido que pedir disculpas por decir que los sociliastas catalanes tenían una relación «un punto sodomita» con el PSOE. «Todo el mundo puede tener un mal», aseguró.
«Lliures o morts», la novela del viaje
El presidente de la Generalitat se llevó para el vuelo del viaje a Rusia «Lliures o morts» (Columna), novela en la que los periodistas David de Montserrat y Jaume Clotet homenajean a quienes lucharon contra las tropas borbónicas en 1714. El libro, un éxito que lleva tres ediciones desde su publicación en septiembre, usa la Guerra de Sucesión para decir que los grandes poderes deciden el futuro de los pueblos de Europa.
✕
Accede a tu cuenta para comentar