Los expertos opinan

«Es un juego político»; por Germán Rueda, Catedrático de Historia Contemporánea
«Es un debate del pasado». Así de claro se muestra el historiador Germán Rueda a la hora de valorar la polémica desatada tras el informe sobre el Valle de los Caídos. En su opinión, «no tiene sentido hacerlo ahora. Debería haberse hecho hace 25 años». Además, añade, «es un debate confuso y un juego político en el que quieren meter a la historia». Según Rueda, Franco no debería haber sido enterrado allí, al ser un monumento a los caídos, pero tampoco cree que suponga ni un inconveniente ni una ventaja el hecho de que sus restos estén enterrados allí». E insiste, «ahora no es el momento».

«No es prioritario»; por Luis Palacios, Catedrático de Historia Contemporánea
Para el historiador Luis Palacios, el debate «es un tema irrelevante cuando el franquismo es pura historia, sobre todo con la situación económica. No es prioritario». Cree que los ciudadanos, con los problemas de paro y crisis, «tenemos que exigir más seriedad a los políticos» y «dejar la historia a los historiadores». Palacios, a punto de presentar su libro «El franquismo ordinario», considera que si todo esto «sirve para fomentar la concordia entre los españoles y acabar con esta vuelta a las dos Españas que ha traído el Gobierno de Zapatero, me parecería bien». Eso sí, ve «lamentable que España no asuma su pasado».

«Hay que asumir la historia»; por Bruno Aguilera, Catedrático de Historia del Derecho
«Los muertos, muertos están y no hay que remover las cosas». Es la opinión de Bruno Aguilera, catedrático de Historia del Derecho, sobre la posibilidad de trasladar los restos de Franco. Según asegura, «se quiera o no se quiera, Franco es parte de la Historia y no se puede renegar del pasado como si no hubiera existido». Para Aguilera, «hay que asumir la historia», mientras se pregunta si servirá de algo exhumar los restos de Franco. En su opinión, «va a provocar una reacción en contra».

Pero, sobre todo, considera que, con la actual situación económica del país, no es el momento de llevar a cabo debates de este tipo. «Es una farsa que un Gobierno en funciones haga esto después de su nefasta gestión. Es un ejercicio gratuito y nefasto», dijo. Y no llega a entender que «se gaste dinero público en una comisión sobre este tema. Es lamentable», añade. Eso sí, considera que «si empezamos así habría que tirar, por ejemplo, la estatua de Largo Caballero». Aunque tiene muy claro que durante la guerra, ambos bandos tuvieron sus aspectos negativos, pero, hoy en día, lo mejor es dejar la contienda «allí, enterradita».

«Traerá mucho odio»; por Javier Paredes, Catedrático de Historia Contemporánea
«La historia es maestra de la vida y sacar los restos de Franco del Valle de los Caídos no va a reportar enseñanzas y sí traerá mucho odio», asegura el profesor Paredes, que considera que todo el debate, desde la comisión hasta el informe de los expertos, «está politizado». «¿Qué pinta un gobierno metiéndose en recintos sagrados?», se pregunta mientras apunta que lo que busca el Ejecutivo –ya en funciones– es «pisar el rabo del león cuando ya está muerto». «Es una bravuconada y un ridículo tremendo», señala, para añadir que «hay que dejar las cosas tal y como están».

«Es muy absurdo»; por Alfonso Bullón; por Director. Inst. CEU de Estudios Históricos
«El Valle es parte de la Historia y no tiene sentido alterarlo; ni sacar a Franco ni crear otro monumento», asegura este historiador, que considera que «sería como pedir a los franceses que sacasen a Napoleón del Palacio de los Inválidos». «Lo mejor es dejarlo como está», apunta, aunque considera que el PSOE «es experto en crear cortinas de humo. Se olvida de la situación económica en la que estamos». Y, al mismo tiempo, critica las intromisiones políticas en la Historia. Eso sí, como otros historiadores, cree que la comisión de expertos, «designada a dedo», también está politizada. «Es todo muy absurdo», dice.