El reto de Simeone

Madrid- Átense los machos, Diego Pablo Simeone aterriza el lunes en Madrid, el martes será presentado y el jueves (29) comenzará a cambiar el ánimo de los aficionados del Atlético, de los jugadores y de los dirigentes. José Luis Pérez Caminero, director deportivo de los rojiblancos –que seguirá en el cargo si hacemos caso a Gil Marín o que peligra en su puesto, si nos fiamos de Enrique Cerezo– anunció la buena nueva y confirmó que su excompañero será el sucesor del denostado Manzano, guillotinado de manera cruel –pese a que en el fondo tienen razón– por unos dirigentes que esperaban que no aguantase la presión y dimitiese para ahorrarse el finiquito.

Así las gasta este Atlético, coto de Gil y Cerezo, que vuelve a cambiar de rumbo para entregarse en manos de un hombre de carácter y de fuerte personalidad como Simeone. Cambio radical para una plantilla alicaída y confundida, que debe recobrar la autoestima, aunque habría que recordar –y eso bien lo saben Luis, Ufarte, Reina, Gárate, etc– las palabras de Merkel. «La moral la venden en la quinta planta de El Corte Inglés», decía el técnico alemán con el que los rojiblancos ganaron una Liga. Así pues, el rearme moral tiene que ir acompañado del buen juego y los resultados.

Reto complicado para Simeone, que firmará por lo que resta de temporada y un año más condicionado a una serie de circunstancias. Caminero aseguró ayer que el «objetivo es ser cuartos». Veintidós partidos –66 puntos– tiene el «Cholo» para llegar a la meta de la Liga de Campeones.

Simeone llegará con el «Mono» Burgos como ayudante, un preparador físico y parece que con un jefe de Prensa. Curioso porque en Argentina aseguran que lleva dos años sin hablar con los medios. Aquí será distinto. Tan distinto, que Reyes a lo mejor sigue en el equipo y se frena su marcha al Sevilla. Lo mismo que Joel o Pulido, que querían irse cedidos al no contar para Manzano. Y no hay que descartar la llegada de refuerzos en el mercado invernal.

Defensa, defensa
-No se trata de la NBA, pero todos los que han visto y seguido a Simeone aseguran que los equipos los construye desde una buena defensa.
- Su sistema preferido es el 4-3-1-2, muy parecido al que ha utilizado Manzano en los últimos encuentros. Adrián y Falcao; Diego por detrás y Mario (o Reyes), Gabi y Arda en una línea de tres. El problema es que aquí las bandas son ocupadas por los laterales y si no están inspirados el equipo es un embudo.
-Será un bloque dinámico, agresivo y que se resguardará atrás para no dejarse sorprender.