Refugio de diseñadores

Asomarse en este nuevo local puede crear cierta confusión. Un maniquí vestido de novia que cuelga desde el techo puede invitar al desconcierto. Por eso, la entrada es casi obligada... y acertada. Porque en el interior de Enfant Terrible, como dicen sus propios dueños, «ni nosotros sabemos lo que ocurre». Es un espacio libre, amplio (420 metros cuadrados) con tres plantas (la del sótano se alquila para showrooms o ventas privadas, por ejemplo) donde se suceden pequeños rincones y córners de diferentes diseñadores y marcas. Su lema es «donde los diseñadores no tienen nada que callarse», muy en consonancia con el aire de galería de arte que reina en el local, y así se pueden encontrar las colecciones de jóvenes creadores, o pedirles directamente que diseñen algo exclusivo para ti. Ellos alquilan estos espacios y, de paso, obtienen servicios fundamentales para una firma del circuito independiente como, no solo la venta al público, sino también servicio de prensa y comunicación, o algo tan básico como una sala de reuniones a su disposición. Mientras, el curioso que entre se encontrará con las camisetas con mensaje de T-shirt Store, las camisetas con adornos artesanales, también para bebés, de Qué bello es vestir! (28 euros), los artísticos bolsos en piel y terciopelos de Myriam Gallego (95 euros), las faldas de efecto 3D de Impuribus (186 euros) o los originales zapatos de la diseñadora catalana Iris Morata. O también podrá hacerse con una de las chaquetitas de fiesta de Angela Rossignoli (95 euros), quien, por cierto, confecciona tu talla sin coste adicional en caso de que no la encuentres en sus perchas. Pero aquí también encontramos productos de cosmética Cremas del Mar Muerto o la alta cosmética ecológica Matane, tocados del Taller de los Tocados o, por qué no, una bici eléctrica de la marca de culto Yamimoto.

PARA NO PERDERSE
Dirección: Núñez de Balboa, 30. Teléfono: 600 640482.
Horario: lunes a sábado de 11:00 a 20:30 horas.
Atención: las preciosas piezas de bisutería de Morgana y las bicis eléctricas de Yamimoto, una tendencia en auge.

KIPLING
Complementos «fashion»
La conocida firma del mono –un imprescindible en cada uno de sus bolsos– deja muy claro en su boutique que sus orígenes como marca de bolsos de lona quedan lejos. Podemos ver siempre colecciones cien por cien fieles a estos inicios, pero su evolución hacia complementos más «fashion» es también un hecho demostrado con sus bolsos en pieles de (casi) lujo, o hasta sus colaboraciones con firmas «top» como Peter Pilotto (el año pasado) o el excéntrico diseñador francés Jean-Charles de Castelbajac.

Dónde: Fuencarral, 20. Madrid.

ALMATRICHI
Más que volantes
Ésta es una de esas marcas «made in Spain» con un enorme éxito entre aquellas mujeres que no se sienten «fashion» desde el punto de vista más estricto, pero desean vestir diferente. Empezó triunfando con aire étnico-hippy-chic, con caftanes estampados con buenos tejidos y detalles con sabor andaluz (su best seller), pero ha ido derivando en una firma con prendas para looks de todo tipo, incluidos los de oficina. Su fuerte, sin duda, son los tejidos de calidad a precios nada desorbitados.

Dónde: Lagasca, 72. Madrid.