El temporal se ceba otra vez con Girona

Barcelona- Unos 10.000 abonados del Baix Empordà temieron a primera hora de ayer lo peor al amanecer sin luz. El fuerte temporal de lluvia y viento hizo caer un cable eléctrico y, si bien Endesa fue restableciendo paulatinamente el suministro, hicieron falta varios grupos de electrógenos para normalizar la situación. Las localidades más afectadas por la falta de luz fueron, en esta ocasión, Santa Cristina d'Aro y Sant Feliu de Guíxols. En el Alt Empordà, la tramontana también afectó a la línea eléctrica. Pero estas zonas gerundenses no han sido las únicas que se han visto sumidas en el fuerte y largo temporal de lluvia, viento e incluso nieve. Desde el pasado domingo Cataluña vive, con sorpresa y cierta resignación, una situación metereológica que se prevé remita hoy a mediodía. Entre tanto, se han llegado a acumular gruesos de hasta 56 centímetros de nieve, que ha llegado a caer en el Pre-litoral y els Ports (Tarragona); se han registrado precipitaciones de más de 100 litros por metro cuadrado en el Maresme (102) y el Alt Penedés (117); y el viento ha llegado a soplar en ráfagas de más de 169 kilómetros por hora. Además, un descenso de las temperaturas poco normal para estas fechas primaverales ha revivido el frío invierno. «Nos encontramos en un situación de normalidad invernal, aunque en el mes de mayo», declaró ayer el director de Protección Civil, Josep Ramon Mora. De momento, no se han registrados graves incidentes causados por el temporal, más allá de la caída de la red eléctrica. Aún así, el Govern mantiene activados los planes de emergencias «Neucat» –el Servicio Metereológico asegura que no nevada en el Pirineo Oriental de esta forma y en mayo desde 1991–; «Inuncat» –por el riesgo de desembalse de los pantanos de Rialb, Sau, Flix y Foix–, y «Procicat» dado que se preven rachas de viento de hasta 126 kilómetros por hora. En cuanto al oleaje, el mar seguirá embravecido. Las olas podrán superar los tres metros de altura. Por todo ello, tanto Protección Civil como el Servei Català de Trànsit piden extremar las precauciones, sobretodo en las carreteras catalanas. Hasta el momento, los Bomberos de la Generalitat han efectuado más de 80 salidas, la mayoría provocadas por el viento.

Endesa pagará 80 euros al día por el apagón de marzoEndesa indemnizará «de forma gradual entre 60 y 80 euros» por día sin luz a los usuarios que se quedaron sin suministro eléctrico tras la fuerte nevada que azotó a Cataluña el pasado 8 de marzo. Así lo explicó ayer la compañía eléctrica en un comunicado, en el que, además, especificó que creará un fondo de 1,5 millones de euros para los ayuntamientos de los municipios afectados.Los abonados recibirán, y de forma acumulativa, 60 euros por las primeras 48 horas sin luz, 70 por las siguientes 24, y 80 más por cada uno de los siguientes días hasta la «recuperación efectiva del suministro». De la indemnización, deben excluirse las primeras 24 horas del apagón. Así, los usuarios que estuvieron sin electricidad durante once días podrán percibir hasta 750 euros. La empresa apuntó que no es necesario un peritaje de los daños ocasiones pra recibir la compensación. Aunque, aquellos clientes que lo crean pertinente, podrán acudir a un sistema de peritaje y valoración para establecer el importe final de la indemnización. En este caso, la empresa no compensará las primeras 48 horas sin luz. Para los abonados que aún no hayan interpuesto una reclamación, Endesa desplegará a partir de mañana un dispositivo especial para tramitar su queja a través de Internet, por teléfono, vía postal o en persona en los puntos de atención al cliente de la compañía. Endesa, que defiende la construcción de la Línea de Muy Alta Tensión (MAT) para evitar futuros apagones, recordó que «sus esfuerzos se centran ahora en la normalización definitiva de la red eléctrica, con el compromiso de conseguirlo el 30 de junio como fecha límite». Cabe recordar que el fuerte temporal de nieve y viento del pasado 8 de marzo afectó a unas 220.000 personas que se quedaron sin luz. La compañía, que no se considera «jurídicamente responsable», movilizó entonces a 1.500 operarios y recursos aéreos para reparar las 33 torres que cayeron y ubicó unos 700 grupos de electrógenos para restablecer el suministro. Las zonas de Girona y el Maresme fueron las más afectadas.