Ibiza arde en el incendio más grave que ha sufrido la isla

Se trata del incendio más grave que ha sufrido Ibiza en toda su historia, según ha informado la consejera de Interior en funciones, Pilar Costa. La intensidad del incendio ha llevado a desalojar alrededor de 200 personas residentes en la zona forestal limítrofe con Portinatx, hacia donde se están propagando las llamas, además de un hotel en el que se alojaban 700 turistas.

Un día después del incendio desatado en Ibiza, el fuego sigue sin poder controlarse y resulta "muy difícil"prever cuándo podrá estarlo, puesto que la zona quemada y donde aún arden las llamas es "muy espesa"lo que motiva que el fuego se propague con "rapidez". Así lo ha comunicado la consejera de Interior balear en funciones en una comparecencia ante los medios en el Ayuntamiento ibicenco de Sant Joan, municipio en el que ya hay calcinadas 2.000 hectáreas de vegetación.

Con el fin de que las llamas no crucen la carretera vieja de Portinatx, se ha establecido una zona de seguridad entre esta zona y Sant Vicent de sa Cala, según ha explicado Costa, quien ha añadido que se trata de evitar el incremento del riesgo de que el fuego alcance este núcleo poblacional que es hacia donde más se acercan las llamas. Por si el fuego fuera poco, la otra preocupación está en el fuerte viento, que complica las labores de control debido al rápido avance de las llamas atizadas por el aire.

Por el momento, no existe riesgo real para el núcleo poblacional y residencial, por lo que no se prevé llevar a cabo ninguna evacuación. Sin embargo, a las 9.30 horas de este jueves ha sido desalojado el Colegio Público de Sant Joan, en colaboración con la Consejería de Educación, si bien, según ha recalcado Costa, no existía riesgo real para los alumnos sino que ha sido una decisión tomada "por prevención".

Y no se queda aquí el susto. Cerca de 200 personas de unas ochenta viviendas situadas en la zona forestal limítrofe con Portinatx han sido desalojadas, así como 700 turistas del hotel 'Paradise', también en este municipio, que han sido realojados en otro establecimiento. Y es que, tal y como ha explicado el delegado de Gobierno en Baleares, Ramón Socías, el viento sopla de forma intensa y ello podría propagar el fuego con rapidez, razón por la que se está procediendo al desalojo de viviendas.

Pero, más allá de las medidas preventivas, se ha puesto en marcha un operativo integrado por unas 250 personas en las tareas de extinción. Entre ellos, una treintena de pilotos y unos cincuenta técnicos ubicados en el lugar de mando adelantado. A estos profesionales hay que añadir los cincuenta efectivos más de la Unidad Militar de Emergencias, que se incrementarán hasta 150 con otro centenar de efectivos que llegarán este viernes. Además, los recursos aéreos movilizados hasta el momento incluyen ocho aviones, seis hidroaviones canadair, ocho helicópteros, una gavina y dos aviones air-tractor.

Esto por el aire. En tierra están los bomberos, que cuentan con cuatro vehículos auto-bomba y dos vehículos nodriza que apoyan a las brigadas del Ibanat y sus propios efectivos de bomberos. El operativo cuenta también con la participación de los agentes de protección civil y la policía local de Sant Joan y de Santa Eulria.

Una riqueza natural convertida en cenizas
Como un "desastre natural brutal", ha calificado el presidente del Gobierno balear en funciones, Francesc Antich, el incendio que ha arrasado en 24 horas 2.000 hectáreas de pinar y masa forestal en Ibiza. Tras asegurar que "se está haciendo todo lo posible"para frenar la propagación del fuego, Antich ha lamentado que el fuego haya arrasado una extensión importante de paraje natural, "una de las riquezas más grandes de esta tierra".

La "estrategia"de actuación trazada por el operativo de emergencias para que el incendio "no trascienda a otras masas forestales"consiste en crear cortafuegos en varios puntos. A ello se han puesto manos a la obra los medios humanos y 204 efectivos de la UME. Poco después, Carme Chacón, titular de Defensa, ha anunciado que enviaría otros 100 efectivos.

La ministra ha reconocido que éste es un problema "feo"que hay que controlar "cuanto antes", aunque las ráfagas de viento del noroeste pueden alterar los focos del incendio, obligando a efectuar más desalojos y dificultando las labores de extinción de las llamas. Su cartera envía este viernes otras dos autobombas y, si el Govern requiere más medios, "los habrá".

Tras puntualizar que el perímetro afectado es "muy grande", el presidente en funciones ha destacado que se necesita "mucha fuerza"para luchar contra las llamas. Por ello, según ha apuntado, se están empleado numerosos medios aéreos: Ocho aviones y ocho helicópteros, según ha informado desde la Consejería de Medio Ambiente a Europa Press.

Aunque ha dicho que es imposible predecir cuándo podría darse por controlado el incendio, Antich ha apuntado que en cierta medida esto depende del viento, puesto que la principal "preocupación"del operativo es la propagación del fuego si el aire sopla con más fuerza. EL

Condiciones meteorológicas no sean "nada favorables"
Precisamente, desde la Consejería de Medio Ambiente han lamentado que las condiciones meteorológicas no sean "nada favorables", dado que desde este miércoles la isla de Ibiza experimenta un fuerte calor, viento del sureste y bajos índices de humedad.

La suma de estos factores es lo que ha provocado que el incendio haya recorrido ya "un total de seis kilómetros de largo", llegando incluso al mar, concretamente, entre Portinatx y cala Sant Vicent. De este modo, han indicado que no hay previsión que se vaya a controlar el incendio en las próximas horas de este jueves.

Por ello se está contemplando la posibilidad de que lleguen a las islas más efectivos, según ha explicado el presidente en funciones del Gobierno autonómico, al tiempo que ha destacado que hay focos del incendio donde los trabajos están resultando más "efectivos"y otros donde "no lo son tanto".

Seis aviones anfibio
Con seis aviones anfibio, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) está colaborando en la extinción del incendio en San Joan de Labritja. De estos, tres han salido de forma escalonada a lo largo de este jueves desde la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz, según ha comunicado el MARM.

Las naves restantes, que son propiedad del Ministerio, ya se encontraban en Ibiza, donde han pernoctado e iniciado las tareas de extinción ya este jueves, de acuerdo con el plan de ataque del director de Extinción. Según ha añadido el ministerio,

Estos aviones anfibio están pilotados por el 43 Grupo de las Fuerzas Aéreas, que han realizado cinco misiones de extinción, con 78 descargas sobre las llamas del siniestro. Esto supone, aproximadamente, unos 429.000 litros de agua, según ha añadido el MARM.