PSOE e IU expulsan a la oposición de Mercasevilla en pleno escándalo

SEVILLA- «Estamos absolutamente sorprendidos, no creímos que se atreverían», aseguraba ayer el ahora ex consejero de Mercasevilla Beltrán Pérez. Pero así ha sido: a través de sus representantes del Ayuntamiento y el Gobierno central, PSOE e Izquierda Unida unieron fuerzas para expulsar a la oposición del consejo de administración, tras 22 años de presencia ininterrumpida y obviando que la institución ya está sumida en un escándalo judicial, económico y político de enormes dimensiones.
Ante la junta general de accionistas y la opinión pública, el consejero apoderado y próximo presidente de Mercasevilla, Alfonso Mir, defendió que el objetivo final es cumplir el «plan de viabilidad», agilizando la gestión al reducir el número de consejeros de 23 a 9, ahorrando costes mediante la supresión de las dietas por la asistencia a las reuniones y «despolitizando» la empresa.
Para el portavoz adjunto del PP, la motivación de la cúpula directiva de Mercasevilla es bien diferente, más cuando Beltrán Pérez renunció al cobro de esas dietas cuando fue nombrado en 2007. «Quieren eliminar a testigos incómodos» ante la gestión de la empresa, que está «manchada por la corrupción».
Pérez insistió en el «atropello» y la «violación democrática» que supone «borrar del mapa» de Mercasevilla a la oposición, que sin imposición estatutaria y sólo «por tradición municipal» ha estado presente en el consejo de administración –y en la junta de accionistas– desde hace dos décadas. «Es un retorno a la época de la dictadura», apostilló. En este sentido, censuró que «en Mercasevilla se ha robado y metido la mano en la caja hasta la quiebra técnica, y quienes investigan esas prácticas se quedan fuera» de los órganos de gobierno por su «papel molesto».
Pérez recordó que fue su partido quien primero llevó a los tribunales la presunta petición de comisiones ilegales a La Raza por el ex gerente Fernando Mellet y su adjunto Daniel Ponce, además de promover la investigación de la venta a Sando del suelo del mercado central y plantear la querella por supuesto delito societario, que incluye el expediente de regulación de empleo de 2007.
Nueva composición
En cambio, el dirigente popular lamentó que «se quedan los principales responsables del escándalo y la gestión presuntamente delictiva que casi ha llevado a la ruina a la empresa». Siguen siendo consejeros Alfonso Mir, el interventor y el secretario –que prefirieron no asistir al encuentro de ayer– y el portavoz municipal de IU, Antonio Rodrigo Torrijos.
La maniobra pasaba por introducir al delegado de Economía y Empleo, Carlos Vázquez, pero el propio Beltrán Pérez advirtió de que los estatutos sólo admiten la participación de «concejales de la Corporación», sin cabida para los no electos.
En sustitución del gerente de la Agrupación de Interés Económico (AIE) y consejero delegado de Emasesa, Manuel Marchena, ingresa en Mercasevilla María del Mar García, directiva de las dos entidades citadas. Aparte se cuentan a otros cuatro representantes nombrados por Mercasa.
Para el PP, todo apunta a que su expulsión se decidió «en las sedes del PSOE de San Vicente y de Ferraz, porque en Madrid están muy preocupados por el alcance del escándalo en Mercasevilla». No obstante, Beltrán Pérez garantiza que «volveré» al consejo de administración, y ya prepara una reclamación judicial por «vicios» en una convocatoria en la que no se especificaba «a los afectados» que su continuidad en la empresa sería objeto de votación.