Siete de cada diez vascos no creen que ETA abandone las armas

Y ello pese a que se «dispara claramente» el optimismo respecto a la evolución de la violencia. Es más, el rechazo a ETA es «frontal y mayoritario», incluso para algo más de la mitad del electorado abertzale. El escepticismo sobre la claudicación de ETA es menor entre los votantes nacionalistas que entre los no nacionalistas, mientras que el 53 por ciento de los simpatizantes de Batasuna percibe una voluntad real de poner fin a la violencia. El polo soberanista integrado por la izquierda abertzale y EA es visto con buenos ojos por el 69 por ciento de los vascos.

Eso sí, dan la bienvenida a esta nueva alianza independentista siempre que condene el terrorismo, algo que aún no ha sucedido por parte de los de Otegi. La mitad de los vascos apoyaría una negociación Gobierno-ETA si la banda deja las armas. El 29 por ciento la secundaría aunque persista la violencia y el 20 por ciento la rechaza. El estudio, no obstante, va más allá y refleja que la violencia terrorista se sitúa por primera vez en un «mínimo histórico» de preocupación, con un dos por ciento.

López suspende
Seis de cada diez vascos sigue en desacuerdo con el pacto PSE-PP y cuatro de cada diez suspende la gestión del Gobierno de Patxi López, que no mejora los resultados de las encuestas tras un año en el poder. Resulta, cuando menos curioso, que los líderes más valorados sean los menos conocidos. Del resto, ni Zapatero, ni Rajoy, ni Ares, ni Rosa Díez, ni Basagoiti, ni el propio López, consiguen llegar al aprobado.