España

Clonación

La Razón
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El fútbol todavía no ha llegado a la clonación de los mejores futbolistas. Si ello fuera posible, probablemente, Escocia jugaría con Dennis Law, que en 1963, en el Bernabéu, dirigió a su selección con el resultado de 2-6. España debería clonar a Xavi para que nunca se perdiera la batuta de la orquesta.
También habría que conseguir la permanencia de Puyol, que aporta genio e imagen ganadora. Ambos tienen ya cercano el recorrido final y, aunque en el caso del centrocampista se vislumbren sucesores, será difícil que alcancen similares condiciones para dirigir el juego de la Selección.
Del Bosque dio oportunidad a Jordi Alba para que la banda izquierda pueda tener un lateral con óptimas condiciones. El lateral del Valencia buscó como acostumbra la llegada hasta el área contraria, pero no siempre le vieron sus compañeros. Dio el pase final para que marcara Silva el primer gol. Y éste, de quien no considerábamos todavía su clonación, fue la estrella del partido ante los escoceses. No sólo por sus goles, sino por su juego.
Del Bosque aceptó la queja del jugador, quien se sentía poco querido en la Selección. El míster le ha dado la titularidad en los dos partidos y ha respondido de tal manera que quizá habrá que aceptar que no cuenta con el mismo aprecio que otros. En el Mundial fue castigado. Tras los encuentros contra la República Checa y Escocia habrá que dedicarle más cariños. Tal y como ha jugado, sería injusto dejarle en el banquillo.
Del Bosque, seguramente, podrá decir que hay tanta calidad en sus listas que es obligado amar a varios.
Posdata. Silva, Villa y Alba, como en Mestalla.