Un pirata muerto y cinco heridos en un combate con el buque «Patiño»

MADRID- A las tres y media de la mañana, en alta mar, un buque gris de apoyo y combate de la Armada española puede pasar perfectamente por un carguero cualquiera de los que navegan en las proximidades de Somalia. Quizá por eso un grupo de piratas decidió probar suerte en busca de una nueva captura que engordara su negocio, y se aproximó hasta el buque español tratando de intimidar a tiros a la tripulación y abordarlo sin resistencia.

Enfrente, en vez de un carguero indefenso se encontraron con el buque «Patiño», tripulado por 154 marinos españoles. Ante el ataque, un grupo de ellos utilizó sus armas ligeras para responder a la amenaza. Lejos de amedrentarse por la respuesta del buque, los piratas redoblaron su ataque, a lo que el personal contestó de nuevo con «fuego de neutralización en autodefensa», según la nota enviada ayer por el Estado Mayor de la Defensa. Es decir, una respuesta directa, al objetivo, ante el insistente ataque de los corsarios.

La contundencia del fuego de los marinos puso en fuga al esquife, que inmediatamente fue perseguido por el helicóptero embarcado en el «Patiño». Durante la persecución, que apenas duró unos minutos, los piratas fueron arrojando por la borda armamento, varios bultos y una escala que habitualmente utilizan para abordar los barcos que secuestran. Al alcanzar su posición, el helicóptero ordenó a los piratas que se detuvieran, algo que no hicieron hasta que la aeronave lanzó fuego de advertencia por la proa de la embarcación. En ella huían seis piratas, de los cuales cinco estaban heridos por el intercambio de disparos entre el «Patiño» y el esquife. De hecho, una vez que los piratas fueron trasladados a bordo del buque de la Armada, los piratas declararon que otro de los asaltantes había muerto en el combate y que fue arrojado por la borda en la huida junto al armamento y la escala. Los cinco heridos fueron atendidos a bordo del buque español. Ninguno de los marinos que participaron en el combate resultó herido.

Por el momento, los seis piratas siguen arrestados en el «Patiño» a la espera de que la Audiencia Nacional decida qué es lo que se debe hacer con ellos. La Fiscalía de la Audiencia ya ha solicitado al Ministerio de Defensa toda la información necesaria antes de pronunciarse sobre la competencia del tribunal español para juzgar a los seis piratas. Fuentes jurídicas aseguraron a LA RAZÓN que la intención del Ministerio Público es invocar los acuerdos firmados por la Unión Europea con países de la zona, Kenia entre ellos, para que sean sus tribunales quienes asuman la competencia. La decisión se dará a conocer hoy mismo y será el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco quien se pronuncie finalmente al respecto. «Intentaremos que se utilicen otros mecanismos porque lo razonable es que no tengan que venir a España», aseguran esas mismas fuentes.

Y es que la Audiencia Nacional todavía está escaldada por lo sucedido con dos de los asaltantes del pesquero «Alakrana», Cabdiweli Cabdullahi «Abdu Willy» y Raageggesey Hassan Aji, condenados a 403 años de cárcel por detención ilegal, robo con violencia y asociación ilícita tras ser trasladados a España por orden del juez Baltasar Garzón. En esa ocasión, los piratas que todavía mantenían secuestrados a los marineros del «Alakrana» exigieron la liberación de sus dos compañeros a cambio de las vidas de la tripulación española, lo que situó a la Audiencia Nacional en una peliaguda situación que ahora nadie quiere repetir.

LA LUPA
Del silencio a una operación detallada
La «operación Atalanta» en el Océano Índico ha estado en las primeras planas españolas en dos ocasiones: el secuestro del «Playa de Bakio» y el del «Alakrana». Éste último fue prácticamente seguido al minuto por la opinión pública. En cambio, la operación de rescate de la ciudadana francesa, un gran éxito para la Armada, pasó desapercibida. Ayer, otra operación exitosa fue notificada por el Estado Mayor de la Defensa sin omisión de detalles. Un cambio.