Rajoy exige a las autonomías «pisar el acelerador» para reducir el déficit

MADRID- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se define a sí mismo como «previsible» y ayer hizo gala de esta cualidad ante la Junta Directiva Nacional de su partido. Había moderada expectación, conociéndole, por si anunciaba alguna nueva medida para el Consejo de Ministros o por si introducía cambios en su discurso tras el exitoso Consejo Europeo de la pasada semana. Y ni lo uno ni lo otro. Lo más novedoso de su mensaje fue la vuelta de tuerca a la presión sobre las comunidades autónomas para que se aprieten más el cinturón en la contención del déficit. «Toca pisar el acelerador», sentenció Rajoy. Las comunidades esperaban tener para estas fechas ya aprobado el mecanismo de auxilio financiero a su deuda por parte del Estado, pero tendrán que seguir esperando, sin plazo. Con los mercados cebándose sobre la deuda soberana, el Ejecutivo no puede activar nuevas iniciativas de apoyo a las autonomías, y de ahí que el presidente coloque sobre ellas el peso de nuevos sacrificios en los próximos meses para llegar al objetivo de déficit. «La reducción del déficit y el cumplimiento de nuestros compromisos es un objetivo capital que compromete a todos», defendió ante el máximo órgano directivo del PP entre congresos.

«Las comunidades tienen que hacer un esfuerzo mayor en los próximos meses. El Gobierno las está ayudando en la medida de sus posibilidades, que no son muchas», añadió. Rajoy tiró ayer de pedagogía y pidió a los suyos que le sigan en el ejemplo para trasladar a la ciudadanía el mensaje de que cada una de las impopulares decisiones que adopta su Gobierno es imprescindible para activar la recuperación económica y para crear empleo. No dijo ni una palabra de las «recomendaciones» del Fondo Monetario Internacional y de la Comisión Europea, es decir, de los nuevos ajustes y recortes que nos demandan desde el exterior. Al contrario, el presidente insistió en que su Gobierno tiene un «itinerario claro» y que por «mucho que arrecie el temporal nada le va alejar de su rumbo y de la confianza en que llegará a buen puerto». Rajoy confirmó que seguirá con su programa reformista, sin entrar en detalles de contenido y de plazos que vayan más allá de la enumeración de sus líneas programáticas para activar la economía y mejorar la competitividad.

Ahora ya con el viento a favor del buen resultado del Consejo Europeo, que avaló la recapitalización directa de la banca que él exigía, Rajoy se ratificó en aquella satisfactoria valoración del apoyo financiero de Europa a nuestras entidades que hizo tras la reunión del Eurogrupo que lo aprobó. «La reforma financiera aprobada por el Gobierno y la línea de crédito europeo servirán para borrar cualquier duda sobre nuestro sistema. La UE hace un préstamo en condiciones favorables que nuestras bancos tendrán que devolver», defendió. Su ejercicio de «pedagogía» incluyó un vez más el reconocimiento de que este año va a ser «muy difícil».

«Con esto no basta»
El presidente del Gobierno insistió ayer en rebajar las expectativas sobre el acuerdo del Consejo Europeo del pasado viernes. Su negociación ha sido bien valorada, pero, no obstante, Rajoy advierte de que con lo acordado en esa cumbre «no basta». «Hemos dado pasos en la buena dirección, pero el futuro nos exige no parar ahí». Rajoy también anticipó que está preparado para nuevas turbulencias de los mercados. «Hemos abierto el camino, pero ahora hay que andarlo», concluyó.