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Las empresas de seguridad a juicio por los robos a joyerías
MADRID- El Gremio de Joyeros, Plateros y Relojeros de Madrid reclamó ayer a las empresas de seguridad, a través de un comunicado, una mayor implicación en la prevención de los robos que asolan a este sector.
Lo que los joyeros pretenden, según su secretario general, Armando Rodríguez, es la firma de un acuerdo de «buenas prácticas» a nivel sectorial, que vincule a todas las empresas encargadas de la seguridad de estos negocios y que contemple protocolos de actuación que estén en función de las necesidades de los propios joyeros, en contra de lo que viene sucediendo hasta ahora. Mientras llega o no ese pacto, el gremio parece decidido a utilizar la vía judicial como medio para que las empresas se hagan cargo de sus posibles negligencias. Este camino lo abrió la sentencia de un juzgado de Zaragoza que el pasado mes condenó a una compañía de mantenimiento de sistemas de seguridad a indemnizar a una joyería por su «baja efectividad» en la prevención del robo que sufrió. Siguiendo su estela, tres joyeros madrileños han llevado ante la Justicia a las centrales de alarmas que habían contratado. Reclamaciones que centran su argumentación en las negligencias y en la falta de asesoramiento que sufren los joyeros en torno a cuáles son las necesidades, vulnerabilidades y riesgos reales de cada negocio en particular.
El propósito de los joyeros es alcanzar un acuerdo general con estas empresas de cara a la nueva ley de seguridad privada que prepara el Gobierno de Rajoy, y que se estima que esté lista después del verano. Dos de sus principales reivindicaciones son, según Armando Rodríguez, que las compañías se comprometan a entregar por escrito y de forma correcta el proyecto de instalación y el certificado de mantenimiento.
Documentos que actualmente en muchos casos no se entregan o se entregan de forma defectuosa. Sobre este punto, la sentencia de Zaragoza da la razón a los joyeros. «Creemos que las empresas deben hacer un esfuerzo de responsabilidad y compromiso profesional en el proceso de verificación y comunicación de los incidentes», recuerda Rodríguez. A este respecto, el gremio de los joyeros ha reiterado en varias ocasiones que «en el 95% de los avisos enviados a las centrales receptoras de alarma por parte de joyerías no se avisó a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado».
La solución, según Armando Rodríguez, pasa por la coordinación: «Las Fuerzas de Seguridad, las empresas de alarmas y los joyeros se necesitan coordinada y comprometidamente para mejorar la lamentable criminalidad que sufrimos».
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