Sevilla

Arturo Fernández: «No he pedido subvenciones en 49 años»

El actor Arturo Fernández, que vuelve a los escenarios de Sevilla después de 18 años con la comedia "La montaña rusa", ha dicho hoy que su compañía no ha pedido subvenciones en sus 49 años de existencia porque las ayudas hacen que quienes las reciben "se echen a la bartola".

"Me puedo jactar de que jamás he pedido una subvención a ningún gobierno, porque pienso que la creatividad no necesita dinero", ha señalado en rueda de prensa el actor, quien actuará del 20 al 28 de este mes en el Teatro Quintero, del periodista Jesús Quintero, que ha preguntado al actor desde el escenario, antes de que el resto de informadores pudieran hacerlo desde las butacas.

"Si a los actores-empresarios nos dan dinero, te echas a la bartola, porque te olvidas un poco de todo", ha indicado Arturo Fernández, antes de recordar: "Todo lo que soy -poco, mucho o nada- se lo debo al público, y eso me obliga a que cada obra sea mejor que la anterior".

Vestido con camisa blanca, chaqueta clara y pañuelo rojo en el bolsillo superior, colores con los que resalta su bronceado, el actor ha reconocido estar "encantado"de que se le siga considerando un galán, y ha afirmado que le gustaría interpretar el papel de Otelo, aunque, como debería maquillarse de negro, "estaría pendiente de no manchar la camisa".

Tras asegurar que es más difícil interpretar comedia que drama, ha revelado que su madre le pedía que se riera al menos dos horas al día, y ha lamentado que "aquí no haya quien se ría ni dos minutos".

En la representación de "La montaña rusa", una pieza escrita por Eric Assous y que en mayo cumple tres años en cartel con Arturo Fernández y Carmen del Valle, el público, ha dicho el actor, suelta 110 carcajadas en el primer acto y 205 en el segundo, aunque también "se les caen un par de lágrimas".

La obra, en la que "huele a Chanel número 5"nada más abrirse el telón, narra la historia de un hombre maduro y casado que tiene una aventura con una joven atractiva mientras su familia está esquiando, lo que le hace "cometer el gran error"de llevarla a su casa, una lección que, según Arturo Fernández, aprenderá el público.

El actor, que no recuerda el número de obras que ha interpretado, ha echado de menos los guiones teatrales antiguos "bien escritos"y ha lamentado que ahora, cuando un autor tiene éxito, rápidamente se vaya a las televisiones, lo que provoca una "ausencia de cabeceras de cartel atractivas para el público". Como director de su propia compañía, el actor ha afirmado que sabe si una actriz es buena sólo con que le dé los buenos días, lo mismo que, asegura, le ocurre con los actores.