Fabiola amenazada de muerte

Una tarjeta postal con la imagen de un sacófago y una inscripción con una frase aterradora: «solo le quedan 21 días de vida». No es el comienzo de una película de miedo sino el contenido de un anónimo recibido por la reina Fabiola de Bélgica. La soberana tuvo constancia de esta amenaza alrededor del 1 de julio por lo que ponían en peligro su vida ayer, en el día de la celebración de la fiesta nacional de Bélgica. Al igual que hace un, año cuando también sifrió amenazas de muerte, la viuda del rey Balduino contó con una protección especial durante el desfile, aunque se negó a ponerse un chaleco antibalas. Los cuerpos de seguridad le pidieron además que se tomara en serio la amenaza y que evitara bromas como la que protagonizó el año pasado, cuando –valiéndose de la historia de Guillermo Tell– mostró durante las celebraciones una manzana en respuesta al anónimo que aseguró que la asesinaría usando una ballesta. La tribuna presidencial del desfile conmemorativo del acceso al trono del primer monarca belga, estaba situada en un lugar despejado, frente al Palacio Real y ante un parque. La extensión no parecía difícil de controlar, pero el acontecimiento congrega todos los años a miles de personas, entre las que el potencial asesino podría fácilmente esconderse. La viuda del rey Balduino ya había recibido en los últimos años hasta cuatro amenazas de muerte. La última, el pasado mes de mayo, fue recibida también por «La Dernière Heure» y en ella se cuestionaban sus gastos y se le exigía renunciar a su dotación «en beneficio de las pequeñas pensiones» y conformarse con recibir 2.000 euros al mes. De no cumplir con la petición, la carta amenazaba con que durante el desfile del Día Nacional el «peligro llegará por el aire» en forma de una «lluvia de ácido» que caerá sobre la escolta de la reina, que recibiría además el impacto de una flecha disparada con un arco. El pasado año, en la vecina Holanda, un perturbado irrumpió con su coche en los actos del Día de la Reina, con la intención de arrollar a la familia real, impactando el vehículo contra los congregados. La familia real resultó ilesa.