Los jueces de cada país vigilarán los presupuestos de sus gobiernos

BRUSELAS- El tejedor de acuerdos entre los líderes europeos, Herman van Rompuy, tiene prisa por sacar adelante el pacto fiscal aprobado la semana pasada, antes de que la desconfianza de los inversores y la resistencia de los parlamentos nacionales lo desmiguen más aún. Por eso, ayer envió ya el primer borrador de este tratado intergubernamental a las capitales, con la intención de que se firme a principios de marzo. Van Rompuy ya anunció el jueves la celebración de una cumbre a finales de enero o principios de febrero que podría sellar un acuerdo político sobre la forma final del texto. Una vez firmado, tan pronto como nueve socios del euro (de los 17) lo ratifiquen, el tratado entrará en vigor.

Este primer borrador será el punto de partida de las discusiones, que comenzarán este martes, y contiene los principios acordados en lo relativo a la introducción de un freno al déficit y más automatismo en las sanciones para los que incumplan el Pacto de Estabilidad. Pero emergen otros detalles desconocidos hasta ahora, como el papel fundamental que jugarán los tribunales nacionales, más incluso que el Tribunal de Justicia Europeo, en la vigilancia de su cumplimiento. El artículo 8 deja en manos de los jueces nacionales la «revisión» del cumplimiento de un presupuesto equilibrado, con un déficit no superior al 0,5% del PIB, así como las medidas para corregir los desequilibrios. Sólo podrán tener déficit los socios «en caso de circunstancias económicas excepcionales o en periodos de severo descenso económico».

Para dar más automatismo a las sanciones, que sólo se aplicarán a los países del euro, a pesar de que otros socios también quieren formar parte del acuerdo, los estados «se comprometerán a aceptar las propuestas o recomendaciones de la Comisión Europea», por lo que renuncian a dar su aprobado para iniciar un procedimiento de infracción, como fijaba ahora el Tratado comunitario. Este artículo 8 ha sido la argucia legal que evitaría la reforma de tratados, y que bloqueó Londres. En caso de que un país rompa este «pacto de caballeros» con el automatismo, también podría ser llevado ante las cortes nacionales por violar un tratado internacional.

Junto a la llamada general a una mayor convergencia de las políticas económicas, el borrador señala que los líderes del euro elegirán por mayoría simple al presidente de sus cumbres, que se celebrarán al menos dos veces al año.

Italia aprueba los recortes de Monti
El plan de ajuste diseñado por el Gobierno de Mario Monti ya es una realidad. La Cámara de los Diputados aprobó ayer por una gran mayoría un paquete de medidas estimadas en 30.000 millones de euros que deben reactivar la economía italiana, reducir la enorme deuda pública (el 120% del PIB) y acabar con el déficit. El ahorro vendrá de la reforma de las pensiones, el aumento de los impuestos y la lucha contra el fraude, informa Darío Menor.