Silván traslada mañana a Arias Cañete la petición de poder abatir más lobos

Valladolid- Acabar con el problema del lobo. Ésta es la prioridad de la Junta y de las organizaciones agrarias (OPAs). Por este motivo, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, trasladará al ministro del ramo, Miguel Arias Cañete, la petición de poder cazar más lobos, unificando el status del lobo en Castilla y León considerándolo especie cinegética tanto al Norte como al Sur del Duero.

Así se comprometió con las OPAs, en un encuentro en Valladolid, en el que también ofreció medidas concretas y compromiso de trabajo fluido, transparente y participativo con el sector ganadero de nuestra Comunidad.

Silván señaló que el objetivo del Gobierno Herrera es «buscar soluciones compensatorias» a los daños, «a la prevención y el control» de este animal para reducir los ataques. «De nada sirve la indemnización, si no atajamos el problema de raíz», añadió.

Al respecto, adelantó que se revisará el plan de gestión, que lleva cuatro años vigente, y se reforarán las medidas «concretas» de control. El responsable regional de la cartera de Fomento y Medio Ambiente explicó que se potenciarán los muladares, -los terrenos alejados de los pueblos en los que tradicionalmente se depositan reses muertas-, para que se puedan alimentar especies como el lobo, después de que se limitara este sistema después del mal de las «vacas locas».

Seguimiento efectivo y ágil
Asimismo, el seguimiento de la especie será «más efectivo y ágil» con métodos como el uso «masivo» de radio-marcadores, un sistema que permite conocer los movimientos de cada animal.

El consejero también indicó que existirá «un nuevo modelo» de cupos de caza del lobo al norte del Duero, más «flexible», ya que en la actualidad no se abaten todos los ejemplares autorizados.

Silván además garantizó la compensación de los daños ocasionados a los ganaderos mediante la convocatoria anual de las ayudas que compensan las franquicias de los seguros contratados por los profesionales y los daños ocasionados con el fin de que no repercutan en la viabilidad de las explotaciones. Independientemente de ello, el Ejecutivo autonómico asume el pago de la totalidad de los daños producidos en las reservar regionales de caza.

Rechazo al seguro
Por su parte, las organizaciones agrarias mostraron su satisfacción por el encuentro, aunque volvieron a reiterar su postura negativa al seguro impulsado por la Junta para solventar los problemas de los ataques de lobos.

El secretario regional de Asaja, José Antonio Turrado, reiteró que la presencia del lobo es incompatible con la ganadería; mientras que el representante de UCCL, Jesús Miguel Martín, afirmó que las OPAs «nunca» estarán de acuerdo con el seguro. En esta misma línea, el líder autonómico de UPA, Julio López, recordó que «no vamos a aceptar que la Junta no asuma los daños patrimoniales», y el responsable de COAG, Aurelio Pérez, se refirió a las sentencias judiciales que «dan la razón» a los ganaderos, y aseguró que «no nos gustaría judicializar este problema, pero no nos queda más remedio».

Las Junta avisa de que la campaña de incendios será «muy complicada»
«La campaña contra la extinción de incendios va a ser muy complicada este año». Así lo advirtió el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, al señalar que los meses de enero y febrero son los más secos de los últimos 60 años, lo que propicia «una alta probabilidad de fuegos». Por este motivo, pidió a la sociedad extremar la precaución, ya que los últimos incendios han sido la mayor parte «causados por la mano del hombre. Antonio Silván, además, subrayó que es fundamental la colaboración entre las administraciones. En este sentido, destacó la colaboración apreciada en los incendios de este fin de semana, principalmente en le término municipal leonés de Las Omañas, en el que corrió cierto peligro la población de San Martin de La Falamosa. El consejero declaró que en estos dos meses la media de fuegos es de entre 20 y 30, algo inusual para la época del año, por lo que reiteró que la cooperación es esencial.