Batasuna regresa por la puerta grande

El mensaje lanzado durante meses tanto por los socialistas como por los nacionalistas vascos de que la vuelta de Batasuna agilizará el fin de ETA caló entre los electores vascos.
De ahí que ayer decidieran depositar su confianza en Bildu y convertirla en la segunda fuerza de Euskadi en número de votos y en la primera en número de concejales, con 953 ediles y 74 mayoría absolutas.

La coalición, integrada por Euska Alkartasuna, Alternatiba e Independientes, recuperó este domingo los votos que parte del electorado de la ilegalizada Batasuna «prestó» en las autonómicas pasadas al PNV. Además, consiguió atraerse al votante de la izquierda abertzale que se abstuvo en los anteriores comicios ante el intento fracasado de Batasuna de regresar al Parlamento vasco y al electorado socialista descontento con la alianza de Patxi López con el PP. Como botón de muestra, los socialistas perdieron ayer una de sus plazas más emblemáticas, el Ayuntamiento de San Sebastián. El candidato de Bildu ganó a Odón Elorza. Mientras, el PP también retrocedió, aunque aguantó mejor el tipo ante la irrupción de Bildu.

La coalición arrasó en Guipúzcoa, donde se erigió con el primer puesto. Pese a ello, la formación liderada por Iñigo Urkullu fue la fuerza política más votada, con casi 326.000 papeletas. No obstante, ocupará a partir de ahora la segunda posición en número de concejales, con 872 ediles. En este nuevo escenario, los nacionalistas y los independentistas controlarán las Diputaciones forales, bajo cuya órbita recae el poder económico de las instituciones vascas, incluido el Gobierno autonómico.

A por las generales y vascas
Por si fuera poco, Bildu tiene en sus manos la llave para desalojar a Patxi López de la Lehendakaritza en las próximas elecciones autonómicas de 2013. De reproducirse en esa cita electoral el resultado de ayer, PP y PSE no obtendrían los escaños suficientes para poder seguir manteniendo su alianza y, por ende, el Ejecutivo en poder de los socialistas.
La irrupción con fuerza de Bildu en el escenario político vasco allanará, además, a la izquierda abertzale el camino hacia la consecución de su objetivo último. La ilegalizada Batasuna pretende sustituir a la coalición por Sortu, si el Constitucional repite sentencia en los próximos meses y le permite inscribirse en el registro de Partidos Políticos del Ministerio del Interior, después de que el Supremo le cerrara la puerta a presentarse ayer a los comicios.

De esta manera, recuperaría el potencial de antaño de cara a las elecciones vascas de 2013.
Previamente, afrontará su siguiente parada: las generales de marzo de 2012. Según los cálculos de los nacionalistas, la izquierda abertzale volverá con dos o tres escaños al Congreso de los Diputados. No obstante, otras estimaciones le otorgan incluso grupo propio en la Cámara Baja en las próximas generales.