Mali confirma a Margallo que los dos españoles secuestrados «están bien»

El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, realizó en la tarde del viernes una visita relámpago a Bamako para interceder por la liberación de los dos cooperantes españoles secuestrados en Tinduf (Argelia) hace más de cuatro meses. El viaje de García-Margallo tuvo carácter secreto y apenas duró 24 horas en las que el ministro tuvo tiempo de reunirse con el presidente de Mali, Amadou Toumani Touré, y con su homólogo, Soumeylou Boubeye Maiga, según fuentes diplomáticas.

Aunque el Gobierno mantiene la «máxima discreción» sobre las gestiones que realiza para conseguir la puesta en libertad de Enric Gonyalons y Ainhoa Fernández, sí reconocieron que los dos «se encuentran bien», tal y como les confirmó el propio Touré.

La visita de Margallo coincidió en el tiempo con la supuesta puesta en libertad de Rossella Urru, la rehén italiana secuestrada junto a los españoles el 22 de octubre en el complejo de Rabuni, en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf.

Aunque al cierre de esta edición el Gobierno italiano aún no había confirmado la buena noticia, la agencia de noticias italiana AGI informaba de que «podría haber novedades positivas en las próximas horas».

Mientras, fuentes mauritanas aseguraban que la liberación sí se había producido y el canje se había efectuado a cambio de la excarcelación de un militante de Al Qaida encarcelado en Nuakchott, Abdelrahman Ould Madou. Junto a Urru también habría recobrado la libertad un soldado mauritano abducido hace dos meses en un puesto militar en la frontera con Mali. El fin del secuestro de este militar también tuvo un precio. El Gobierno de Nuakchott se vio forzado a liberar a un segundo terrorista, en este caso a un tuareg de Mali responsable de haber proporcionado la información que llevó al secuestro de un ciudadano italiano y su mujer, procedente de Burkina Fasso en Mauritania en 2009.

La noticia sobre el estado de los dos cooperantes prosaharauis se produce después de que el pasado 12 de diciembre el Gobierno recibiera la primera prueba de vida. La rama escindida de Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) que mantiene cautivos a Fernández y Gonyalons hizo llegar un vídeo a Exteriores través de la agencia Afp en Bamako. Esta misma agencia informó ayer de que el mediador que «representa» al Movimiento Unido para la Yihad en Africa Occidental ha hecho llegar también sus exigencias económicas: diez millones de euros por la vida de cada cooperante. Es la primera vez que España tiene que lidiar con un doble secuestro en África. Diez días antes del ataque en Tinduf, dos españolas de Médicos Sin Fronteras fueron capturadas en Kenia y llevadas a Somalia.

LOS PERFILES
Ainhoa Fernández
Esta abogada de 29 años se encontraba descansando en su habitación de Rabuni la noche del asalto. Con amplia experiencia en el mundo del voluntariado, pertenece a la rama de Extremadura de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui. Antes del secuestro se había referido en Facebook a los cooperantes «como tesoros» tras conocer lo ocurrido a MSF en Daadab.
Enric Gonyalons
De origen mallorquín, este cooperante que prestaba ayuda a los refugiados de Tinduf es miembro de la ONG vasca Mundabat. Tras el asalto a tiros del complejo en que se alojaban los voluntarios, Gonyalons fue herido en una pierna. En la prueba de vida hecha llegar por los terroristas se puede ver que tiene la pierna izquierda vendada.