La tradición el salvoconducto para «burlar» la prohibición

Defensa envió una circular a los acuartelamientos de la ciudad aclarando que sí se puede tocar, algo que se ha hecho de manera tradicional en la salida y entrada de los pasos de los templos.

Así ocurrió ya el 15 de agosto en la procesión de la Virgen de los Reyes, patrona de la Archidiócesis. Así pues, las hermandades aseguran que la prohibición tendrá un escaso efecto y eso que son varias las cofradías que cuentan con representación militar. El Domingo de Ramos está La Paz, fundada por ex combatientes de la Guerra Civil en 1939, cuyos pasos van acompañados por una escuadra de gastadores del arma de Ingenieros con traje de gala.

El Miércoles Santo, la Marina hace lo mismo con las imágenes del Carmen Doloroso, aunque su presencia es menor que la que va junto a la Esperanza de Triana, con la que este año procesionarán un treintena de marineros de la Armada y de Infantería de Marina. La hermandad de San Bernardo cuenta con una representación de Artillería. El Viernes Santo, San Isidoro, cuya Dolorosa, la Virgen de Loreto, es patrona de Aviación, acoge a un nutrido grupo de jefes y mandos.

El Santo Entierro es la que cuenta con más militares, pues sale con una compañía de honores que también repetirá. En Málaga, la Virgen de la Pontificia y Real Congregación del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Ánimas y Nuestra Señora de la Soledad, conocida como Congregación de Mena, estará un año más acompañada por centenares de miembros de la Legión, a quienes apenas afectará el nuevo reglamento de honores militares, toda vez que los efectivos acudirán con carácter «voluntario», según fuentes de la citada agrupación, que apuntaron que se actuará al igual que en las hermandades militares de Sevilla.

Así, el Jueves Santo se producirá el tradicional desembarco de la Legión en el Puerto de la ciudad, al que llegarán los legionarios que desfilarán con el Cristo, a quien cantarán el tradicional «novio de la Muerte».