Hermès no entiende de crisis

El grupo informó hoy en un comunicado que la principal aportación procedió de los artículos de marroquinería, como bolsos, maletas y agendas, que produjeron 1.204,8 millones de euros (un 20,8 por ciento más), por delante del apartado de ropa y accesorios, con los que facturó 445,4 millones de euros, un alza del 17,5 por ciento.

La mayor mejora en la facturación, no obstante, se obtuvo en el sector de la relojería, con un avance del 22,9 por ciento, hasta los 112,6 millones, y también fue destacable la de la seda y textiles, que con 283,8 por ciento, creció un 18,9 por ciento.

Por áreas geográficas, Hermès facturó en 2010 en Asia 1.084,1 millones de euros, con un incremento del 19 por ciento con el que superó tanto a sus ventas en Europa, de 900,6 millones y un alza del 18 por ciento, como a las obtenidas en América, donde creció un 24,1 por ciento, hasta los 384,7 millones.

La marca precisó que a nivel general solo en el cuarto trimestre de 2010 sus ventas progresaron el 17 por ciento, con una actividad mantenida en todas sus áreas geográficas, que creció el 25 por ciento en América y el 16 por ciento tanto en Asia como en Europa.

En América, Hermès destacó que su crecimiento se debió en gran medida al éxito de su primera tienda dedicada al "universo masculino", que fue inaugurada a principios de año en la Avenida Madison de Nueva York.

El grupo indicó también que publicará sus resultados anuales el próximo 4 de marzo, pero avanzó que confía en que el crecimiento del año pasado sea ligeramente superior al 40 por ciento.