Sevilla
Asenjo propone celebrar actos de oración especiales
Afirma que «no tengo en mis manos evitar su celebración», por lo que invita a difundir el «Evangelio de la vida».
SEVILLA- El arzobispo, Juan José Asenjo, aboga por rezar como «una forma sencilla de implicarnos en la defensa de la vida humana», ante la celebración en Sevilla de un congreso abortista entre los días 21 y 23 de este mes que «no tengo en mis manos evitar». Asenjo sugiere en una carta pastoral a los sacerdotes que «programen algún acto especial de oración ante el Santísimo por esta causa».
Apunta que numerosos fieles le han transmitido durante los últimos días su preocupación por el hecho de que Sevilla sea la sede de este congreso –«según parece, financiado por instituciones públicas de la capital y la región», indica en su carta– y señala que, aunque no puede impedirlo, «sí tengo el deber de iluminar la conciencia» sobre un acontecimiento que «no va a ser un hito glorioso en la historia de nuestra ciudad».
Asenjo señala dos posibles vías de rebeldía de los cristianos ante este hecho. Una es «que nos sensibilicemos ante este tema auténticamente mayor y tratemos de sensibilizar a nuestros conciudadanos». Y otra «forma sencilla de implicarnos en la defensa de la vida humana es rezar». El prelado insta a «difundir en cualquier oportunidad el Evangelio de la Vida, es decir, el valor sagrado de toda vida humana desde la fecundación hasta su ocaso natural, de modo que paulatinamente vayamos sustituyendo la mentalidad abortista y la ‘cultura de la muerte' por una cultura que acoja y promueva la vida».
Además, Asenjo afirma que la Ley del Aborto supone en la práctica una «liberalización» y recuerda que «su carácter legal no le confiere el marchamo de moralidad, pues no todo lo que es legal es moral. El aborto es siempre una inmoralidad, un mal objetivo; no es progreso sino regresión».
Para el arzobispo, este hecho «en realidad es un ‘crimen abominable', como lo calificó el Concilio Vaticano II (GS 51), por ser la eliminación voluntaria y querida de un ser humano a petición de sus progenitores, con el concurso de los médicos, los primeros, junto con los padres, que deberían tutelar esa vida naciente».
Monseñor Asenjo rechaza contundentemente la celebración en Sevilla del congreso abortista y aprovecha en su carta pastoral para mostrar su «respaldo y aliento» a las instituciones de cualquier tipo que «promueven iniciativas a favor de la vida y que ayudan a las madres en circunstancias difíciles para que acojan generosamente el fruto de sus entrañas».
«Legítimamente rechazable»
El Consejo de Hermandades y Cofradías también emitió ayer un comunicado para afirmar que el congreso es «legítimamente rechazable por repugnar abierta y públicamente al espíritu en defensa de la vida humana que nos inspira».
La nota señala su «inquebrantable posición» en «defensa a ultranza de la vida desde el mismo momento de su concepción», matizando que «por encima de cualquier matiz político». Además, el Consejo muestra su «profundo desagrado, discrepancia y malestar» con el grupo hotelero que acoge la celebración de dicho congreso.
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