Del Nido que seguirá en el Sevilla FC no ve «viable» que se ejecute ya la sentencia

SEVILLA- El abogado José María del Nido dejó ayer la vehemencia mostrada durante las sesiones del juicio del «caso Minutas» para su representación legal, Pedro Apalategui, que anunció que presentará un recurso de casación ante el Tribunal Supremo por la sentencia que le condena a siete años y seis meses de cárcel como cooperador necesario por el delito continuado de fraude asociado a los de prevaricación y malversación de caudales públicos.
Fue Apalategui el que realizó una incompleta valoración de la decisión judicial, ya que admitió que aún no había «tenido tiempo» de terminar la lectura de los 480 folios en los que se sustenta la decisión de la Audiencia Provincial de Málaga. Sí adelantó que ha visto «luces de alarma» que le servirán para preparar el recurso y se mostró confiado en que las medidas cautelares que pedirá la Fiscalía Anticorrupción no incluyan la ejecución de la sentencia y el «ingreso en prisión» de su cliente.
El letrado señaló que en el caso de que Anticorrupción reclame que se cumpla la condena, el Tribunal no debe aceptarla porque «no existe riesgo de fuga» por lo que «legalmente hablando está muy lejos de que pueda ser viable». «Que lo pida – por el Ministerio Público– está en su derecho, que lo concedan ya lo veremos».
Salvado el escollo principal, la entrada en la cárcel, la defensa de Del Nido entiende que las medidas cautelares que se adopten contra su cliente deben ser similares a las que ha tenido durante este tiempo –por ejemplo, ha necesitado una autorización del tribunal cada vez que ha viajado al exterior–.
La sentencia también obliga a devolver la cantidad malversada, 2,7 millones correspondiente a 79 minutas fraudulentas. Tampoco este extremo, asegura Apalategui, justifica nuevas medidas cautelares, ya que recordó que Del Nido tiene consignados cinco millones desde el comienzo del juicio.
Por su parte, la intervención del presidente del Sevilla FC se centró en defender su continuidad en el cargo. Consideró que ni la condena de siete años y seis meses de cárcel; ni la petición del 90 por ciento de su familia; ni el consejo de su despacho profesional en pleno; ni el «daño» –que reconoció– puede hacer a la imagen de la entidad son motivos suficientes para dejar el club de fútbol. Su presencia en este deporte posibilitó su vinculación con Jesús Gil, origen del caso, y a él seguirá ligado mientras los máximos accionistas de la entidad lo acepten.
«La bofetada fue gorda», admitió. Ese abatimiento no le impidió asegurar que es «inocente» hasta que no exista sentencia firme y que su presencia en la entidad es beneficiosa porque se considera «un buen gestor». Tampoco reducirá su agenda y estará presente en todos los actos con «intensidad».

«La alcaldesa de Marbella puede pedir misa»
Con los papeles intercambiados, Apalategui ejerció de azote de las acusaciones personadas en la causa. Una de ellas es el Ayuntamiento de Marbella, que a través de su portavoz Félix Romero, aseguró ayer que esperan que las indemnizaciones se paguen «lo más rápido posible». Esta reclamación fue contestada de manera tajante por el letrado: «La alcaldesa puede pedir misa, pero mientras la resolución no sea firme no se puede acreditar la misma». El propio Del Nido abundó: «Para la tranquilidad de la alcaldesa, tengo prestada una fianza de sólo cinco millones de euros».