Decálogo para comprar seguro en la red

Recuerda que los últimos datos publicados por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio revelan que, en 2009, el 26,5 por ciento de las personas de 15 ó más años compraba habitualmente por Internet.

La primera recomendación es que el sitio web contenga todos los datos de la empresa que ofrece el producto: dirección física, teléfono y horario de atención al cliente; si se trata de una empresa española, debe tener los datos de inscripción en el registro mercantil.

La segunda es verificar que el sitio web ofrece diferentes formas de pago, entre otras: tarjeta bancaria, contrarrembolso o por transferencia; los datos bancarios sólo deben suministrarse en el momento de realizar la transacción.

Tres, nunca se debe suministrar el número secreto (PIN) de una tarjeta bancaria y jamás se ha de contestar a preguntas que el usuario considere inapropiadas durante la transacción en una compra electrónica; tampoco se deben introducir datos bancarios desde equipos públicos con un tráfico de personas elevado (cibercafés, locutorios, etc.).

Cuatro, en el momento del pago mediante tarjeta bancaria, hay que asegurarse de que la dirección de la página es segura. La dirección http:// debe cambiar a https://, añadiéndose una "s"de "seguro"cuando se esté efectuando la transacción, y debe aparecer el candado amarillo "ssl"de seguridad online cerrado, al pie del navegador; una llave entera al pie de la página también es un distintivo de sitio seguro.

Cinco, comprobar que la descripción y las características del producto se ajustan a lo que se busca. Esto es especialmente relevante para las compras de productos informáticos y de electrónica en grandes distribuidores, donde se debe verificar la coincidencia del código de producto solicitado con el código de producto que se encuentra en el sitio web del fabricante.

Seis, asegurarse del precio final del producto incluidos los impuestos indirectos y los gastos de envío, que pueden correr a cargo de la empresa o del consumidor; no se debe pecar de ingenuidad: si el precio final del producto es demasiado bajo es probable que no sea real.

Siete, comprobar si existen restricciones geográficas de entrega de productos, quién ha de pagar los gastos de envío y si existe algún tipo de seguro para la entrega.

Ocho, tener claro si el sitio web de la empresa tiene una dirección para reclamaciones y otra para devoluciones. El usuario dispone de siete días hábiles para devolver el producto, y en este caso, la empresa estará obligada a devolver el importe total del mismo en un máximo de 30 días; si no lo devuelve en ese plazo el consumidor podrá reclamarlo duplicado. Asimismo, la empresa tiene que especificar si se hace cargo del coste de los gastos de envío en casos de devolución.

Nueve, hay que asegurarse de que se compra lo que se quiere con los productos personalizados o que puedan deteriorarse con rapidez, puesto que los CD de música o películas desprecintadas y periódicos y revistas de tirada diaria en ningún caso pueden ser devueltos.

Diez, se debe conservar siempre una copia impresa de confirmación de la compra para futuras reclamaciones y guardar cualquier comunicación mantenida con la empresa.