«Queremos lanzar un producto nuevo el turismo político»

Doctora en Conservación arquitectónica y planificación urbanística, su especialidad es el patrimonio cultural palestino. Desde marzo de 2007 cuida y promociona no sólo el patrimonio, también el resto de los recursos de su país: es ministra de Turismo y Antigüedades de la Autoridad Nacional Palestina. -¿Qué papel juega el turismo en la economía de su país?-Por el momento, supone un 10 por ciento, pero pretendemos que llegue a suponer un 15. Claro que todo depende de la situación política. Pienso que puede llegar a ser el segundo o tercer sector económico, tras los Servicios Públicos y la industria de Servicios. -¿Quién visita Palestina y por qué?-Actualmente, se mantiene prioritariamente el turismo religioso y los turistas llegan de España, Francia e Italia, los países más religiosos. Pero esto está cambiando, ahora se está incrementando el turismo de los países del Este, sobre todo de Rusia, porque ahora tienen más poder adquisitivo y también hay muchos cristianos.-Entonces, el turismo de peregrinación es el fundamental...-Sí, por supuesto; y lo seguirá siendo. Pero estamos desarrollando otros tipos, como el cultural (Palestina rebosa historia, arquitectura...), el ecoturismo... y queremos lanzar el «turismo político», que consiste en conocer al palestino de a pie, convivir con él, meterse en su casa... Estamos construyendo infraestructuras para que los visitantes se queden en Palestina más de un día, que es lo que hacen ahora (llegan con el autobús, hacen las visitas y se van en el mismo día). Los touroperadores ya tienen programas con estancias de una semana. -La situación política, el conflicto, ¿no es un problema para conseguirlo?-Claro que es un problema, es algo a tener en cuenta, porque, para empezar, impide que el viajero detecte y sienta la cordialidad del palestino. Y lo que queremos es que el turismo permita ver cómo somos; que el visitante forme parte del mundo palestino y, de vuelta a su paíse, se lo transmita al resto del mundo, que al conocer al pueblo palestino, los viajeros sean portavoces de la paz. En las noticias sólo se ve lo malo, y queremos que el turista llegue a Palestina, conviva con nosotros y cuente cómo es nuestra cultura, nuestra música... nuestros 10.000 años de historia, que también es la suya, sus raíces. El conflicto influye, sí, pero las recomendaciones internacionales cada vez son mejores, invitan a venir.-¿No convendría un acuerdo en el ámbito turístico con Jordania e Israel? ¿No sería bueno para todos?-Ése es el objetivo, y día a día se trabaja con una cierta coordinación, pero no nos consideran de igual a igual y no podemos disponer de nuestros propios recursos. Mi sueño es tener independencia para poder llegar a esos acuerdos a los que usted se refiere de igual a igual, para potenciar el disfrute de esta zona milenaria de nuestro planeta.-Háblenos del resto de los recursos turísticos que tiene Palestina.-El ecoturismo en Jericó y en el Jordán; turismo cultural e histórico; el desierto y el Mar Muerto... Pero no tenemos infraestructuras, aunque eso, lejos de ser un hándicap, se ha convertido en un atractivo, pues significa vivir como un palestino más, es toda una experiencia.